«Hoy cose más un país que haya autonomías a que exista un modelo centralizado». Fue una de las muchas reflexiones que dejó el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, en la clausura del XXXII Seminario de Estudios Autonómicos '40 años de Estado Autonómico en Castilla-La Mancha', organizado por la UCLM en las Cortes autonómicas.

Page defendió el modelo porque «ha acercado la democracia a la gente y acelerado los servicios básicos», dijo ante una audiencia de estudiantes de Derecho. Algo fundamental para una comunidad que «no quiere ser más, pero donde tenemos claro que no podemos ser menos», consciente de que ambos planteamientos sugieren que «no son admisibles los privilegios, que no es lo mismo que las diferencias», que confesó son muchas a lo largo y ancho de nuestro territorio.

El jefe del Ejecutivo regional disertó sobre estos 40 años de autonomía en los que centró el planteamiento en monarquía, y la continua tensión territorial, convertida a veces en populismos que «hay que evitar». «Buena parte del independentismo es populismo puro» dijo, al tiempo que advirtió que «la legitimidad de todas las autonomías es la misma, y arranca con la Constitución de 1978», que diseñó a su juicio un modelo federal que llamamos autonómico.

Page defiende las autonomías porque «acercan la democracia»En este sentido apuntó a que en España hay algunos partidos que quieren atacar a las autonomías, «pero se presentan a las elecciones autonómicas, es curioso», y reflexionó sobre si solo se hubieran dado las autonomías de Cataluña, País Vasco y Galicia, y el resto «estuviéramos haciendo cola en la Castellana para pedir un instituto. ¿Qué hubiera pasado?». Page cree que si no hubiera habido autonomía hubieran surgido partidos regionalistas en Castilla-La Mancha.

Es por eso que aseguró que el modelo que hoy tenemos «es muy difícil de revertir», porque si se plantea la devolución de las competencias en Sanidad o Educación «habrá miles de despidos y no será posible gestionar».

Sí apuntó en su discurso a una competencia que no debería ser delegada por el Estado, como son las policías autonómicas: «no lo vi claro hasta el conflicto en Cataluña». «El Estado siempre tiene momentos en los que todo se pone a prueba –apuntó– y la última fase es la imponer por la fuerza, y esa solo la puede dar el Estado», subrayó.

Page defiende las autonomías porque «acercan la democracia» - Foto: CARMEN TOLDOSBuenos tiempos para la Universidad. En su intervención, García-Page se mostró convencido de que «van a venir buenos tiempos para la Universidad» después del acuerdo firmado con la Junta para los próximos años. «Asusta la cifra pero es que hablamos de más de mil millones de euros» avanzó, en los que va a ir «el futuro de una institución troncal en la historia».

Tras presumir de ser uno de los egresados en Ciencias Jurídicas de la primera promoción, deslizó que «es probable que podamos plantearnos nuevas titulaciones a la vuelta de pocas semanas».