¿Prescindir de Jesús Herrero a falta solo de tres jornadas para el final ha sido una medida temeraria por parte del presidente del club? ¿Reaccionó bien el ya exentrenador ante esta decisión? ¿Le dará tiempo a Javier Laguna a aportar su grano de arena en esta decisiva recta final de temporada? ¿Qué tienen que decir al respecto los jugadores sobre la pista? Las respuestas a todas estas preguntas se despejarán con el tiempo, juez implacable, y también con los resultados deportivos, que son los que dan o quitan razones de un modo aséptico y objetivo. Pero lo que manda a partir de ahora, después de una de las semanas más convulsas de la historia del Vestas Alarcos, es lo que suceda en el partido que le enfrentará este sábado (19 horas, Puerta de Santa María) al BM Soria, con el descenso en juego, nada menos.
Porque la situación no es para estar tranquilos. A falta de tres partidos, el Vestas Alarcos es quinto, fuera de la zona de descenso a Primera, pero empatado a puntos con el Cajasur de Córdoba, que sí descendería y al que le tiene ganado el 'gol-average' particular. El calendario que tienen por delante parece más exigente para los manchegos, que además de recibir al BM Soria (los castellanos se jugarán su última bala por la permanencia), tendría que visitar la pista del Villa de Aranda y acabar en casa recibiendo al Alcobendas, que pasan por ser los dos mejores conjuntos de esta segunda fase. Por su parte, el Cajasur recibe este sábado al Alcobendas, después visitará al colista Teucro y cerrará recibiendo a un Zamora que no se jugará nada. Dicho de otro modo, si el Vestas Alarcos quiere seguir dependiendo de sí mismo deberá ganar sus tres partidos. En el caso contrario, tendrá que cruzar los dedos para que los cordobeses pinchen en alguno.
Por ello, el encuentro de este sábado ante el BM Soria es el primer 'match-ball' en contra para el equipo ahora entrenado por Javier Laguna, que regresa al banquillo alarquista justo un año después de anunciar su marcha por motivos personales y familiares. "Me he encontrado un grupo unido. Hemos realizado buenas sesiones de entrenamiento, con mucha intensidad. La situación es complicada y difícil, pero creo que se puede conseguir. Estamos con la máxima ilusión", decía el ciudadrealeño en sus primeras palabras como nuevo entrenador, e intentará "cambiar pequeños detalles que entiendo nos pueden hacer mejorar o sorprender".
Sobre la importancia de este partido, Laguna era rotundo: "Hay que ganar sí o sí a Soria". "Para ellos este partido es su última bala. Tienen un equipo muy trabajado, sin grandes individualidades, aguerrido y trabajador", analizaba. Y todo ello después de "una semana complicada y todos debemos remar en la misma dirección. Tenemos la mejor afición de España, que es la peña La Batalla, y con el apoyo de la gente seguro que todo es más fácil. Hacer cábalas ahora mismo no sirve de nada, solamente pensamos en ganar los dos puntos y luego ya veremos el resto de resultados".
En la última jornada el Vestas Alarcos caía en Zamora (26-25), mientras que los sorianos perdían en su casa contra Sant Quirtze (30-37). En el partido de la primera vuelta los de Ciudad Real perdían por 31-28.
Javier Laguna tendrá a toda la plantilla a su disposición.