Dione Alex Veroneze 'Bateria' es una de las grandes 'estrellas' del fútbol sala mundial. El ala brasileño , que en diciembre cumplirá 32 años, alcanzó este domingo la cifra de 200 goles en Primera División con el tanto de penalti frente a ElPozo Murcia, rival al que precisamente la pasada campaña marcó su primer tanto con la camiseta azul. Un registro al alcance de muy pocos y que viene forjado también por muchos momentos amargos y de duro trabajo para recuperarse de las graves lesiones que ha sufrido.
Nadie como Bateria sabe lo que es volver a levantarse tras recibir la peor de las noticias para un deportista. Jugando en el Barça, adonde llegó tras deslumbrar en Inter, su primera parada en España en la campaña 2011-12, sufrió una grave lesión en la rodilla izquierda tras la cual muchos apuntaron que no volvería a jugar. Lo hizo y volvió a España para jugar en el Cartagena, donde volvió a lesionarse de gravedad en esa rodilla.
A finales del pasado verano el Viña Albali apostó por él y el brasileño, junto a sus compañeros y la afición del Virgen de la Cabeza, ha recuperado la sonrisa. «Es una cifra especial y ahora echo la vista atrás y más que con los goles me quedo con todo el trabajo y lo que ha costado. Es una labor diaria», analiza el '10' del Viña Albali.
«Los goles es lo más bonito, pero hay que sufrir mucho a diario para mejorar y recuperarte de lesiones duras, demostrar que estás capacitado para volver a jugar al más alto nivel», repasa Bateria, que se muestra muy a gusto en Valdepeñas.
«Cuando llegué era mediados de septiembre, sin haber jugado al más alto nivel durante meses y me costó entrar. No tuve el protagonismo que quería al inicio, pero poco a poco fui teniendo protagonismo y marcando goles importantes. Esta campaña todos hemos empezado de cero y estoy muy a gusto y con confianza. Es un sitio ideal para mí, con unos valores de humildad y trabajo con los que me identifico», indica Bateria, que cree que el objetivo del equipo debe ser «estar luchando por los títulos porque para ganar trofeos influyen muchos factores», uno de ellos el apoyo de la afición, «que es una locura» y a la que le encantaría dedicar su gol 300 en Primera. ¿Por qué no?