Dos casos de triquinosis tras consumir carne de jabalí

Ana Pobes
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No había pasado control veterinario. Los afectados son miembros de una misma familia y "la carne no se comercializó". El brote se originó hace un mes en Piedrabuena, donde se detectaron otros siete posibles casos

Dos casos de triquinosis tras consumir carne de jabalí

La triquinosis vuelve a estar presente en la provincia con dos personas afectadas tras consumir carne de jabalí sin control veterinario como así confirmaron a este medio fuentes de la Consejería de Sanidad. Los afectados son miembros de una misma familia y el brote se  originó hace aproximadamente un mes en Piedrabuena, donde se detectaron nueve personas como posibles casos de triquinosis pero solo dos dieron positivo y no necesitaron hospitalización. Las mismas  fuentes aseguraron que la carne no se comercializó y se dedicó al autoconsumo. Recordar que la triquinosis es una enfermedad parasitaria causada por el nematodo Trichinella que se adquiere con el consumo de carne infectada de cerdo o jabalí y no sometida a altas temperaturas.  

El alcalde de Piedrabuena, José Luis Cabezas, comentó que hace aproximadamente un mes la delegación de Sanidad le comunicó, "como principal autoridad del pueblo", la existencia de varias personas afectadas en Piedrabuena por esta enfermedad que la Consejería "siempre ha mantenido muy controlada con el seguimiento de los afectados y sus familiares y poder averiguar así su procedencia para frenar el foco de la contaminación". En relación a posibles irregularidades, desconocía si ha existido o no alguna irresponsabilidad y agradeció en este sentido la colaboración de la Guardia Civil para investigar los hechos.  

A raíz de ello, la Guardia Civil de Ciudad Real investiga a cuatro personas por varios delitos de lesiones relacionados con carne infectada con triquinosis en la provincia, donde, según informó en una nota, ha habido personas afectadas por esta dolencia en las comarcas en Piedrabuena y Almadén.  Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) llevaron a cabo las investigaciones en los últimos días del año pasado y comienzos de 2020, y gracias "a la rápida actuación de los agentes del Seprona y de los servicios de salud pública de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha ha evitado que estos brotes de triquinosis tuviesen consecuencias mayores". 

El instituto armado recordó que estas cuatro personas han sido investigadas como presuntos autores de delitos de lesiones imprudentes al haber permitido que carne infectada con triquinosis llegase al consumidor final. Las diligencias instruidas por este caso han sido puestas a disposición de un juzgado de Ciudad Real. 

 Este es el tercer foco de la enfermedad que sufre la provincia en un año. A principios de 2019,  un total de 17 personas, también de una misma familia, se vieron afectadas por un brote de triquinosis un mes después de haber consumido carne de cerdo procedente de una matanza casera que realizaron sin autorización en Retuerta del Bullaque. Todos estos afectados, entonces, consumieron carne cruda procedente de los embutidos elaborados en la matanza. Pero a finales de año, otra persona resultó afectada de triquinosis en Fontanosas, una pedanía de Almodóvar del Campo al haber consumido carne de jabalí que supuestamente no había sido sometida al obligatorio control veterinario. En esta ocasión, la Consejería de Sanidad confirmó que además de la persona diagnosticada, otras doce, de edades comprendidas entre 25 y 71 años,  estaban en proceso de evaluación como casos sospechosos. 

más control. El presidente del Colegio Oficial de Veterinarios de Ciudad Real, José Ramón Caballero, recordó que la provincia cerró el año pasado con "cinco focos de triquinosis que afectaron a más de 40 personas". Casos, algunos de ellos, "relacionados con matanzas domiciliarias en las que no se cumplió con el protocolo" y otros, "con capturas ilegales de jabalíes". 

Ante el elevado número de casos, Caballero aseguró que el Consejo Autonómico de Veterinarios de Castilla-La Mancha ha mostrado su "preocupación" por la "dejadez continúa de todas las administraciones y por la falta de control y concienciación de la población", ya que recuerda que la triquinosis es "muy peligrosa y afecta a la salud humana". Por ello, el Colegio de Veterinarios ya ha iniciado las conversaciones con la Consejería de Sanidad y Salud Pública con el fin de llevar a cabo actuaciones enfocadas a recordar la importancia de cumplir con la normativa, por lo que los profesionales de la medicina veterinaria confían en que a partir de ahora "los controles sean mayores". "Se cuenta con los medios, los conocimientos y las posibilidades para atajar este problema donde también es esencial reforzar el control los establecimientos y concienciar al ciudadano para que esto no vuelva a ocurrir", señaló.  En declaraciones a La Tribuna, Caballero calificó 2019 como un año "horroroso" en relación a triquinosis, pues "hablar de esta enfermedad en pleno siglo XXI es algo tercermundista". 

El consumo de especies de jabalí y cerdo doméstico para autoconsumo es una práctica extendida y habitual en la provincia, que en determinadas ocasiones puede acabar generando ciertos riesgos, advirtió la Guardia Civil, que ha apuntó que para evitarlos basta con la recogida de muestras y su posterior analítica por parte del veterinario mediante los métodos que recogen los reglamentos sanitarios de la Unión Europea.