¿Has pasado el COVID? ¿Cuándo recibiste la última dosis?. Estas dos preguntas eran la puerta de entrada a la carpa que, por segunda vez, se instala en el Campus de Ciudad Real. Tras inocular la tercera dosis a todos los grupos de edad en los hospitales, la vacunación vuelve a cumplir un ciclo y busca ampliar la protección frente al virus llevando la vacuna a espacios públicos, esta semana la universidad y la próxima en supermercados.

La de ayer fue una jornada en la que mereció la pena instalar estas carpas con más de un centenar de personas que se acercaron en Ciudad Real a este espacio para recibir la tercera dosis principalmente. El enfermero de la Gerencia de Urgencias, Emergencias y Transporte Sanitario (Guets), Jorge Martínez, apuntó que «habían tenido mucha más afluencia de la que esperaban» con gente joven a los que les inoculó Moderna, también tenían previsto Pfizer pediátrica, por si acudía algún menor de 12 años. «La mayoría viene tras pasar los tres o los seis meses recibir la dosis de recuerdo», señaló el enfermero, quien ha pasado durante el COVID por momentos claves como cribados masivos o la vacunación en la calle. «Veo ahora a la gente bastante más predispuesta que antes, con menos miedo», algo que puede deberse a las navidades, la pandemia y a la necesidad de vacunarse para viajar . «Muchos tienen planeado viajar este verano o en los próximos meses y quieren completar la pauta» que es necesaria para ir a algunos países. De hecho, no todos los que acudieron pudieron vacunarse, bien por la cercanía del contagio o de la segunda dosis. A algunos se les recomendó que esperaran una semana y acudieran a Carrefour, en la jornada de vacunación en supermercados.

Entre los vacunados había estudiantes internacionales como Maite Bernardo que está realizando el doctorado y lleva seis meses residiendo en Ciudad Real. «Entiendo que la vacuna es importante para ayudar al control de los casos más graves de la COVID», explicó la brasileña, que pasaporte en mano acudió a la carpa. «En Ciudad Real y en Castilla-La Mancha es muy fácil vacunarse y la atención médica», dijo. También estaba el mexicano Alejandro Robles, que está haciendo un Erasmus internacional. «Me puse las dos vacunas Pfizer en Estados Unidos», señaló el estudiante, quien recordó que allí se podía ir a «cualquier farmacia» y elegir la marca de vacunación o bien parar camionetas que circulaban animando a la vacunación. En Méjico era necesario esperar a hacerlo por edades, como en España. «Creo que es necesario vacunarse para la sociedad», dijo Daniel, otro estudiante, en este caso de la región, que acudió a la carpa con Paula y Marta, dos alumnas de la UCLM. La idea de los tres era vacunarse, aprovechando el final de los exámenes y que tenían la oportunidad de hacerlo entre clase y clase.

Vacunación abierta para erasmus y estudiantes - Foto: Tomás Fernández de MoyaNo todos los que acudieron a esta llamada fueron estudiantes. Por ejemplo, la catedrática Beatriz Cabañas acudió a la carpa. «No me ha dado tiempo a que me inoculen la tercera dosis, tendría que ir al centro de salud, pero como me pilla algo retirado, he aprovechado el día de hoy», indicó.