Los padres incursos en un proceso penal por violencia de género no van a poder disfrutar de un régimen de visitas a sus hijos menores a resultas de la entrada en vigor de la reforma del Código Penal el pasado 3 de septiembre. Una medida para reforzar la protección del menor como víctimas también de la violencia de género y evitar hechos como el asesinato de un niño a manos de su padre en un hotel de Barcelona o el caso de las niñas de Tenerife. En Ciudad Real, lamentablemente también se han dado casos. Manzanares, Argamasilla de Alba y Daimiel han sufrido la violencia vicaria con crímenes horrendos, hombres que han asesinado a sus hijos, hijastra y suegra.

Entre enero y julio han aumentado los casos de mujeres víctimas de la violencia de género, más de un tres por ciento, pero mayor es el porcentaje del incremento de los casos con menores a cargo de la víctima, un 14,65 por ciento, y más de un 19 por ciento los considerados de especial relevancia con menores que están bajo el cuidado de las mujeres maltratadas. De 176 casos detectados el pasado enero con una alta probabilidad de que el agresor ejerza sobre la víctima violencia muy grave o letal se ha pasado a 210, según datos del Poder Judicial. Una violencia ejercida por el agresor sobre la mujer que podría extenderse a otras personas cercanas a ella, especialmente hacia los menores a su cargo. En este apartado, 126 de los 210 casos de especial relevancia con menores a cargo de la víctima están considerados de riesgo alto, 65 medio y 19 extremo.

Entre enero y julio se contabilizaron 6.924 víctimas de la violencia machista, frente a las 6.708 de enero, más de un tres por ciento. A partir del primer mes del año ha ido aumentando de forma exponencial y con ello los casos activos, que suman 750. Un total de 313 son casos con menores a cargo de la víctima, 44 están en situación de vulnerabilidad, seis en riesgo y 42 son de especial relevancia.

Según datos relativos al periodo comprendido entre abril de 2019 y julio de 2021 sobre una situación de vulnerabilidad, había un caso extremo, 16 de riesgo alto, 14 medio, 11 bajo y dos no apreciado.

En los casos activos de víctimas de la violencia de género con menores a su cargo en situación de peligro se encuentran 23 personas, dos en riesgo extremo, 19 alto y dos medio.

Caso por caso. El fiscal jefe de Ciudad Real, Luis Huete, considera que hay que tener la «máxima delicadeza» para no caer en injusticias. «Hay que ver caso por caso para resolver», dice en relación a la reforma del Código Penal para combatir la violencia vicaria.

Explica que «se ha establecido un criterio general para el régimen de visitas, que se suspende en los casos de violencia de género», pero el texto legal que acaba de entrar en vigor «admite excepciones», indica el jefe de la Fiscalía Provincial.

 Se permite al juez autorizar las visitas en una «resolución motivada en el interés superior del menor» y «previa evaluación de la situación de la relación paternofilial», aunque en ningún caso se podrá dar ese paso cuando el progenitor esté en prisión, provisional o firme, por delitos de esta naturaleza. En este contexto, el fiscal jefe considera que en Ciudad Real «debería haber más equipos para evaluar esas relaciones paternofiliales». «La regla general establece este precepto», remarca.

Lo que está claro es que hay que evitar que los maltratadores ejerzan sobre los hijos la violencia con el objetivo de causar el mayor daño a sus parejas o ex parejas. La mayoría de los 40 asesinatos de menores a manos de sus padres o de las parejas o exparejas de sus madres desde 2013 se produjeron tras la separación, el divorcio o cuando la mujer inició una nueva relación sentimental. A últimos de año, en Villarrubia un adolescente vio cómo su madre moría a manos de su pareja.