Cuando surgió el teléfono móvil, pocos podrían imaginar que unas décadas después habría más teléfonos en el bolsillo que personas hay en España y, sobre todo, que quedarían obsoletas una tecnología clave en los municipios como es la cabina. Ese teléfono ha sido el empleado por muchos para llamar fuera de la provincia, controlando el tiempo, para tener conversaciones que no se podían tener en casa o para pedir un rato más. Son historias que seguramente no se repitan más allá de 2022 y es que este 31 de diciembre, dentro de apenas tres meses, las cabinas finalizan su ciclo de vida útil. Esto implica que 172 cabinas de la provincia de Ciudad Real dejarán de tener uso y las 689 que aún quedan en Castilla-La Mancha.

Detrás de la desaparición se encuentra un cambio en la Ley general de Telecomunicaciones, anunciado desde hace tiempo, pero que aún no se ha publicado. La modificación implica que las 14.824 cabinas de teléfonos que están desplegadas por toda España dejen de ser un servicio universal obligatorio, la idea es hacerlo ahora a la «vuelta del verano», siete años antes de cumplir su primer centenario, que hubiera ocurrido en 2028.

Telefónica es el operador encargado de prestar este servicio. En el año 2019 se hizo la última concesión por un periodo de dos años, hasta el próximo 31 de diciembre, tras un concurso convocado por el Ministerio de Asuntos Económicos y de Transformación Digital y que quedó desierto, ya que no hay operadores interesados por este servicio. Para hacer una idea en España, hubo una media de 0,17 llamadas al día en las casi 15.000 cabinas durante 2020 o lo que es lo mismo toda la red registró una llamada semanal de promedio. «La irrupción de la telefonía móvil ha sido la causa principal de la caída en desuso de estas estructuras», señalaron desde Telefónica, que como ejemplo indica que «más del 88 % de la población reconoce no haber usado nunca una cabina, que hace muchos años desaparecieron en países vecinos a España, según datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC)». 

La última llamada para 172 cabinas de teléfono - Foto: Rueda VillaverdeDesde la empresa recordaron que ahora se abre un plazo en el que será los ayuntamientos los que soliciten el desmantelamiento de las cabinas. «Telefónica no tiene la decisión para desmontar cabinas y únicamente puede analizar y estudiar la posible viabilidad de las peticiones que por requerimiento motivado hagan los ayuntamientos», por lo tanto analizará la opción de quitar la infraestructura si se lo piden.