Nueva gala drag queen en el Quijano

D. A. F.
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La Asociación Cultural Valkyrias organiza el nuevo certamen que servirá para recaudar fondos para la Asociación Guerreros Púrpura

Uno de los últimos concursos de drag queen celebrado en Ciudad Real. - Foto: Rueda Villaverde

El Carnaval de Ciudad Real volverá a dejarse llevar por el brillo de las lentejuelas, las plataformas y las plumas. Después de varios intentos que no llegaron a consolidarse, de nuevo calienta motores una gala de drags queen merced a la iniciativa de la Asociación Cultural Valkyrias, que se ha embarcado en la organización de un certamen de alcance nacional con el que esperan llenar el Teatro Municipal Quijano el próximo 24 de febrero.

Los organizadores y presentadores del certamen son Alejandro Ruiz y Carlos Márquez, éste último también presidente de Wado CLM. El primero de ellos explicó que la idea de organizar este concurso surgió «pensando cómo se podría potenciar el Carnaval de Ciudad Real para que recupere el esplendor que tenía hace unos años», de modo que sus convocatorias «atrapen» de nuevo a visitantes de otras localidades más allá del Domingo de Piñata y sea un pistoletazo de salida para la implantación de otras actividades a lo largo de dicha semana.

Ruiz reconoce que hubo intentos anteriores con un certamen similar que no salieron bien, pero aspiran a que este nuevo empeño sirva para consolidarlo «y darle un enfoque solidario». Las entradas se venden a tres euros.

Nueva gala drag queen en el QuijanoNueva gala drag queen en el Quijano - Foto: Rueda VillaverdeCarlos Márquez comentó que el concurso se está promocionando «de diferentes formas» y por supuesto por redes sociales, además de por medio de su difusión a todas las asociaciones culturales, juveniles y Lgtbi, con el objetivo de que «puedan participar y puedan ver este concurso». El certamen será de ámbito regional, «incluso nacional» apunta Márquez, lo que le hace ser optimista sobre el éxito de la convocatoria.

Ruiz precisa que el certamen se realiza con la implicación del Ayuntamiento de Ciudad Real y Wado CLM, que aportan los galardones, «1.000 para el primer premio, 600 euros para el segundo; y el tercero son 400 euros». El primero estará patrocinado por el Ayuntamiento, el segundo por Concejalía de Igualdad, y el tercero Wado, explica. A su juicio, esta cuantía puede ser decisiva para animar a más participantes, atraer más público y recaudar más dinero a beneficio de Guerreros Púrpura.

La inscripción aún está abierta y se ha previsto un máximo de 16 participantes, aclara Ruiz. De momento, ya se ha alcanzado la decena de inscripciones.

La gala incluirá una intervención de la Guerreros Púrpura, números musicales de al menos dos grupos diferentes que se intercalarán con las actuaciones de las drags y un número a cargo de uno de los presentadores, enumera Ruiz.

Otra de los atractivos que quieren darle a la gala es que se convierta en una sorpresa para alguno de sus asistentes, explica Ruiz, quien recuerda el programa de Isabel Gemio ¡Sorpresa, sorpresa! como fuente de inspiración para esta idea. Por ello espera que algún voluntario se ofrezca para tratar de sorprender a alguno de los espectadores de la gala.

La vicepresidenta de Valkyrias, Pilar Sánchez, añade que su objetivo con esta propuesta es «fundamentalmente ampliar el Carnaval de Ciudad Real y a la vez ayudar a la Asociación Guerreros Púrpura económicamente con el dinero que se recaude por la venta de las entradas». Esta entidad, surgida en los últimos años, tiene el objetivo de ser parte activa en las fiestas populares que se organizan en Ciudad Real, ya sea la cabalgata de Reyes, el Carnaval, las cruces de mayo o la romería de Alarcos.

Por su parte, Guerreros Púrpura se enfoca en la ayuda a familias de niños afectados por enfermedades raras, explica Urbano Fernández, uno de sus voluntarios, quien agradece especialmente la generosidad de Valkyrias. La asociación, surgida en Ciudad Real, tiene también una importante implantación en Madrid vinculada al Hospital Infantil del Niño Jesús. En la capital de España se sostiene un piso para familias de niños hospitalizados.