Si 2021 se despidió dando un aviso de una cierta paralización del mercado laboral en Ciudad Real, los primeros tres meses de 2022 han vuelto a poner sobre la mesa una evolución de los datos de empleo en la provincia que hablan de destrucción de puestos de trabajo y de más desempleados. La EPA del primer trimestre del año marca un incremento de 4.200 personas sin empleo en Ciudad Real y casi 9.000 ocupados menos, con una tasa de paro que supera el 18%.
En la provincia hay 41.500 personas sin trabajo y 185.700 ocupadas. Es, prácticamente, la misma fotografía que ofrecía la Encuesta de Población Activa del mercado laboral ciudadrealeño en el verano de 2020, el primero marcado por el impacto del COVID. Ahora ya no se mira a la pandemia para justificar esa situación sino que se señala a la alta inflación, Ciudad Real es la sexta provincia de España donde más han crecido los precios en el último año, y al impacto de la crisis de Ucrania en las empresas e industrias del país.
De hecho, mirando sector a sector la evolución del empleo, es la industria la que mayor descalabro sufre en el arranque del año. Según la EPA solo en este sector de actividades se han destruido 3.800 empleos en tres meses, el 12% del total, y la ocupación retrocede a su nivel más bajo desde el inicio de la crisis del coronavirus. Además, hasta marzo, también había menos gente ocupada en la construcción y en los servicios, donde sigue encontrando acomodo la inmensa mayoría de los ciudadrealeños con un trabajo: casi siete de cada diez personas tienen una actividad vinculada al sector terciario.
Refejo de esta situación es la subida que experimenta la tasa de paro. Según el INE, vuelve a superar el 18%, llega al 18,23% y es la más alta desde hace justo un año, cuando rozaba el 20%. Es esa comparación de cómo estabamos entonces y como estamos ahora la que arroja alguno de los datos positivos que recoge la EPA. Por ejemplo, el número de desempleados en Ciudad Real es menor ahora que hace doce meses: 41.500 frente a 45.600; y gran parte de esa situación se explica por el empleo femenino. Hay 3.500 mujeres menos en paro que hace un año y 500 ocupadas más. Eso sí, la tasa de paro femenina sigue siendo más alta que la masculina: del13,3% entre ellos, del 24,96% entre ellas.