Este fin de semana se disputa la penúltima jornada de la primera fase en la División de Honor Plata Masculina. El Vestas Alarcos recibe el sábado (19 horas) al Ibiza, un rival que se la jugará en el Quijote Arena ya que necesita imperiosamente sumar los dos puntos para mantener vivas sus posibilidades de acceder a la segunda fase entre los cinco mejores. Una situación que convierte este partido en una verdadera 'final', también para el equipo de Ciudad Real, que después de venirse de vacío de su gira barcelonesa, no se puede permitir el lujo de perder también contra los baleares. En ese caso, estaría obligado a ganar en la última jornada en una pista siempre complicada como la del Sarrià catalán, o cruzar los dedos para que el Málaga pinche en alguno de sus dos encuentros.
Las cuentas están claras. Tras la victoria del Ibiza el martes en su aplazado contra Esplugues (23-19), el próximo rival del Vestas Alarcos es sexto con 17 puntos, a dos puntos del Málaga y a tres de los manchegos. En caso de victoria en el Quijote Arena se colocaría a uno solo, a falta de una última jornada en la que los de Jesús Herrero tendrán que regresar a Barcelona, mientras que los ibicencos recibirán al Sant Quirze, un rival en teoría asequible.
Por ello, en el Alarcos no quieren ni oír hablar de jugarse la clasificación para la fase por el ascenso en la última jornada en Barcelona, y más después de la desagradable experiencia en los partidos en Sant Quirze y Esplugues de la semana pasada. Por ello, los jugadores se han mentalizado para tomarse este partido como una final, y jugadores que no estarán en plenitud de condiciones físicas como Álvaro Torres o Samuel Gómez forzarán para jugar.
En nombre del vestuario hablaba esta mañana Manu Díaz Mata, que dejaba claro que "para Ibiza es una final, pero para nosotros también". El extremo malagueño asegura que la plantilla no quiere "esperar a la última jornada en Sarrià" para certificar esa clasificación con el grupo de los mejores, por lo que el duelo de este sábado será "un cara a cara entre dos equipos que se lo tomarán como una final".
Y para poder sumar los dos puntos, o al menos uno, contra este rival la clave será "minimizar las pérdidas, correr y defender como lo estábamos haciendo antes", decía Manu Díaz, que reconocía que el equipo acabó "afectado" por las dos derrotas cosechadas la semana pasada en las pistas de Sant Quitze y Esplugues.