Nuevo paso hacia la IGP de la 'Cebolla de La Mancha'

A. Criado
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La Asociación de Productores de Cebolla de Castilla-La Mancha da un nuevo paso en su objetivo de lograr la Indicación Geográfica Protegida (IGP) para la 'Cebolla de La Mancha' con el registro del pliego de condiciones

Nuevo paso hacia la IGP de la 'Cebolla de La Mancha' - Foto: Pablo Lorente

La Asociación de Productores de Cebolla de Castilla-La Mancha (Procecam) ha dado un nuevo paso en su objetivo de lograr la Indicación Geográfica Protegida (IGP) para la ‘Cebolla de La Mancha’ con la publicidad, por parte de la Dirección General de Alimentación de la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, de la solicitud de registro del pliego de condiciones. Un documento en el que figura, entre otra información, la descripción del producto, la delimitación de la zona geográfica y su método de cultivo. A Luis Fernando Rubio, director de Procecam, le gustaría que la IGP Cebolla de La Mancha fuera ya una realidad el próximo mes de noviembre, coincidiendo con la celebración en Albacete del Congreso Internacional de la Cebolla. Sin embargo, consciente de que los plazos burocráticos suelen alargarse más de lo previsto, emplaza su aprobación definitiva (Bruselas tiene la última palabra) a 2021. «Llevamos años trabajando con la Junta de Comunidades para que este pliego cumpla con todos los requisitos exigidos por Europa», afirma para añadir que actualmente actúan como marca de calidad colectiva, también reconocida por la Unión Europea. La zona de producción y manipulación de la ‘Cebolla de La Mancha’, la conocida como cebolla tardía o de día largo, se extiende por varias comarcas de la provincias de Cuenca, Toledo, Albacete y Ciudad Real. En este último territorio, precisa Rubio, cuentan con explotaciones en Campo de Calatrava, especialmente en Bolaños, uno de los términos con mayor producción de cebollas de todo el país, Campo de Montiel y La Mancha. Agricultores de Manzanares, Daimiel, Villarta de San  Juan, Herencia y Llanos del Caudillo, entre otras localidades, forman parte de Procecam, que engloba en total a alrededor de 150 empresas y cooperativas y 300 productores de la región. Luis Fernando Rubio explica que nueve de cada diez cebollas que se exportan fuera de nuestras fronteras se cultivan en Castilla-La Mancha y que la IGP ayudará al sector a «defenderse» en un mercado internacional muy competitivo a través de la «calidad», frente a otros países productores que ponderan precios más bajos en su estrategia comercial. Además, avalada por este sello europeo, la ‘Cebolla de La Mancha’ también garantizará la «seguridad alimentaria» con la implementación de una serie de medidas que supondrán «costes adicionales» en la producción. Las características de este tipo de cebollas, «de color cobrizo, buena calidad de conservación y un calibre más grande», han conquistado ya los mercados europeos, sobre todo Reino Unido y Alemania, «países en los que apuestan por la calidad», y poco a poco se abren paso en otros importantes destinos comerciales como Estados Unidos, Canadá y Emiratos Árabes Unidos. Rubio destaca las investigaciones que llevan a cabo en los campos de ensayo para mejorar un producto que tiene un rendimiento por hectárea superior al de otros territorios, siendo Ciudad Real, a día de hoy, el referente nacional.