El éxito de la misión en Irak «depende de todos y de cada uno», ha asegurado el coronel jefe interino de las Fuerzas Aeromóviles del Ejército de Tierra (FAMET), Mariano Arrazola Martínez, dirigiéndose a los 75 militares del contingente que va a partir a Oriente Medio al mando del comandante Jorge Ginés Acero para integrarse en la coalición internacional de 74 países liderada por Estados Unidos en apoyo del Estado Iraquí en la lucha contra los terroristas de Daesh
El acto oficial de despedida de los 65 hombres y 10 mujeres de la tercera rotación del contingente Ispuhel IX (siglas en inglés de Unidad de helicópteros españoles en Irak) se celebró ayer en uno de los hangares del helicóptero de combate Tigre, en el Batallón de Helicópteros de Ataque I acantonado en la base militar de Almagro.
El coronel Arrazola reconoció la «disponibilidad», «dedicación» y «adiestramiento intensivo» de los militares que parten en misión de apoyo a Irak. Durante seis meses han estado entrenándose, la última fase de adiestramiento en la Base Coronel Sánchez Bilbao de Almagro. «Todos sois imprescindibles para que el mecanismo funcione», les aseguró el jefe interino de las FAMET tras pedir a los 75 militares del contingente que cuiden la retaguardia, que se mantengan en buenas condiciones físicas y mentales y con la moral alta.
El coronel jefe interino de las FAMET entregó las banderas de bolsillo - Foto: Tomás Fernández de MoyaEn su alocución afirmó que el Ejército español hace un esfuerzo importante para mantener una pequeña flota en Irak en condiciones de operatividad continuas. De ahí que tengan más helicópteros de los que vuelan, dijo en alusión a las aeronaves de transporte pesado y medio que aporta España, concretamente tres Chinook y dos Cougar para helitransporte de las tropas de la coalición.
El coronel recordó a preguntas de periodistas que la coalición se creó cuando los terroristas de Daesh ocuparon la tercera parte del país a finales de 2014. Se organizó una coalición internacional con mayor peso estadounidense y España contribuyó siendo uno de los países que más tropa aporta desde el principio con una unidad en Besmayah, cerca de Bagdad, en la que se entrena a las unidades iraquíes para fortalecer el Estado de Irak, y sean capaces de combatir a Daesh. España también contribuye otro tipo de unidades que realizan otras misiones.
De entonces (2014) a ahora «se ha avanzado mucho» en la lucha contra el terrorismo yihadista, aunque la amenaza sigue existiendo.
La despedida tuvo lugar en uno de los hangares del helicóptero de combate Tigre , en la Base de Almagro - Foto: Tomás Fernández de MoyaEl coronel Arrazola, que mandó una unidad parecida en Afganistán y que conoce bien Irak, recordó que en 2016 empezó el asalto al bastión definitivo del Daesh. De ahí que resaltara la importancia de preparar las misiones «con mucho esmero y seguridad. Hay que ser muy preciso tanto en la preparación como en la ejecución». Algo que ha llevado a rajatabla el comandante Jorge Ginés Acero, que está al mando de los 75 militares que partirán a Irak dentro de unos días.
La preparación «ha sido dura e intensa», aseguró el jefe del contingente, quien añadió que las unidades de helicópteros están en preparación constante por su propia idiosincrasia. Al hilo de ello, remarcó que el vuelo es una «tarea muy exigente», muy compleja que requiere una «dedicación plena». A lo largo de los últimos seis meses han hecho un esfuerzo muy grande para entrenarse, preparar el material e integrar las unidades: cuatro batallones de helicópteros acantonados en distintos puntos de España, como por ejemplo Canarias. «Esta fase de integración representa un handicap importante y la agrupación larga y complicada», apostilló el comandante jefe.
En la Base Coronel Sánchez Bilbao de Almagro han realizado la fase final de adiestramiento y cohesión. Y en Almagro, en uno de los hangares del helicóptero de combate Tigre tuvo lugar ayer el acto de despedida al contingente, «sencillo, sobrio», con la liturgia del Ejército. El contingente y militares destinados en el Batallón de Helicópteros de Almagro recibieron en formación al coronel jefe interino de las FAMET, que entregó a los 75 militares una bandera de bolsillo.
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Después posaron junto a los mandos de los batallones que forman parte del contingente: la teniente coronel Margarita Pardo de Santayana, del Batallón de Helicópteros de Transporte V; teniente coronel jefe del Batallón de Helicópteros de Maniobras VI con base en Canarias, Alberto José Cherino; teniente coronel jefe del Batallón de Helicópteros de Ataque I de Almagro, José Manuel Galvañ; y teniente coronel Francisco Javier Carpio, del Batallón del Cuartel General de las FAMET. (Más información en la edición impresa)