Ya falta menos para el próximo 'experimento' de Luis Enrique. Será el próximo sábado ante Albania y en Barcelona, y son muchos los que piensan que no va a dejar a nadie indiferente. Como la inmensa mayoría de sus alineaciones y planteamientos. Desde luego, el asturiano está obligado a hacer probaturas porque solo dispone de dos amistosos antes de la cita mundialista. Ayer fue el segundo día de concentración y se puede decir que el buen ambiente es la nota predominante en la Roja, algo por lo que ha peleado siempre el seleccionador de España.  

La gran novedad de la jornada fue el regreso de Koke Resurrección al grupo de jugadores citados. También que la sesión matinal fue más larga de lo esperado y los actos con los patrocinadores tuvieron que esperar pacientemente un buen rato. 

Una pantalla de grandes dimensiones en un lateral del campo principal de la Ciudad del Fútbol, junto al andamio desde el que observa los partidos de entrenamiento y da órdenes tácticas a sus jugadores, es el nuevo 'invento' del que fuera técnico del Barcelona y la Roma.

Rodrigo (i) disputa un balón con Raúl de Tomás. - Foto: Pablo GarcíaAllí se proyectan al momento acciones prácticas a los jugadores para su corrección, detalles a estudiar del rival, errores a corregir... Todo esto fue muy de agradecer por parte de los pupilos de Luis Enrique, que ya cuenta con sus 23 convocados para preparar los dos amistosos. 

El capitán del Atlético de Madrid, Koke Resurreción, que se ausentó en la sesión vespertina del pasado martes por una leve sobrecarga muscular, regresó con normalidad al trabajo junto al resto de sus compañeros en una sesión a puerta cerrada.

Después de una primera toma de contacto suave, la intensidad del trabajo creció en el segundo día de concentración, que aprovechó el seleccionador para comenzar a ensayar aspectos tácticos con jugadores a los que probará en los dos próximos partidos. Su intención es hacer jugar a todos los convocados y realizar pruebas de cara al Mundial de Qatar. 

Luis Enrique charla con el portero David Raya. - Foto: Rodrigo JiménezTodos son conscientes de que el técnico asturiano se llevará a la cita más importante del balompié a los que él considere en mejor estado de forma y, sobre todo, que se acoplen a la idea que él tiene de equipo. 

Si algo ha demostrado Luis Enrique es que le sobra personalidad, por eso no le ha temblado lo más mínimo el pulso para llevarse a futbolistas como Gavi, que a sus 17 años se ha convertido en uno de los jugadores con mayor proyección del planeta. Tampoco ha tenido problemas para traer a absolutos desconocidos para el aficionado medio. 

Emotivo regreso

Por otra parte, el encuentro del próximo sábado en la Ciudad Condal tiene mucho de sentimental. Así, los internacionales Dani Carvajal y Ferrán Torres mostraron en un acto publicitario de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), el «orgullo» que se siente dentro del vestuario por el regreso de la selección española a Barcelona 18 años después.

«Es un orgullo tremendo, 18 años después jugar en Barcelona, poder estar ahí y volver a disfrutar de un encuentro en la ciudad», manifestó el defensa madridista antes del partido en el estadio del Espanyol ante Albania. «Esperamos que nos alienten como todas las ciudades. Estoy convencido de que va a ser así», añadió.

Para el delantero culé también será especial por ser Barcelona su nueva ciudad y donde está triunfando tras su regreso al fútbol español, después de brillar en el Manchester City:«Para mí, va a ser especial porque Barcelona es mi nueva casa. Esperamos que nos apoye la gente y que disfrutemos del partido junto a la grada». 

También será muy especial jugar en Cornellá para el ariete 'periquito' Raúl de Tomás, que confesó que ir al Mundial de Qatar «sería el mayor logro» de su carrera deportiva tras encadenar su segunda convocatoria con la selección española. «En caso de que no suceda, estaré apoyando y animando a la selección como siempre», añadió.