Este martes acabó el tercer curso de la pandemia y lo hizo en una situación de normalidad, sin el uso obligatorio de la mascarilla o la cuarentena de los centros ante un positivo. El curso 21/22 ha supuesto el fin de las medidas sanitarias para frenar la pandemia, pero los sindicatos consideran que hay aspectos de estos años que deben mantenerse, como la bajada de ratios, que se hizo para limitar los contagios, y el personal de refuerzo. Este incremento de personal es al que apelan en este tramo final del curso, porque consideran que no deben perderse. Igualmente, los sindicatos educativos advirtieron que el año que viene será en el que vuelvan a sus reivindicaciones. Estos tres cursos se han centrado en los problemas derivados del COVID y, ahora, piensan iniciar un camino de negociaciones para revertir los recortes de la época de la popular Dolores Cospedal.
De este modo, el portavoz de STE-CLM, Pedro Ortega, recordó que los docentes no son «ni sanitarios ni expertos en coronavirus» y han seguido cada una de las recomendaciones que se han ido dando para el curso, centrando su labor en que el confinamiento y los cambios en el aula no afectaran al rendimiento académico. En su opinión, han logrado el objetivo, ya que, en la última EvAU, los estudiantes de la región han sacado una nota similar a la «de antes de la pandemia», pese a esos tres o cuatro meses de confinamiento, cuando «el nivel educativo bajó». «Lo hemos recuperado en estos dos años», considera Ortega, gracias a las ratios y la contratación de más profesores, pero también «al esfuerzo del alumnado y del trabajo que el profesorado pone para alcanzar las mejores notas».
Por este motivo, ante el regreso a la normalidad, desde STE-CLM creen que no se debe perder el refuerzo. «Cualquier empresa de 30.000 trabajadores le repercutiría que le quitasen mil empleos» y, en este sentido, podría haber una merma de «la calidad educativa», al eliminarse los cupos de COVID, si se suben ratios, y también al desconocerse si se dará continuidad a los programas de éxito escolar, con 205 cupos. El COVID«no va a desaparecer del todo y lo vamos a tener muy presente», recordó Ortega, quien apunta a que hay unos 1.500 interinos contratados entre ambos programas.
«Tras dos años de pandemia en los que los docentes han estado al pie del cañón es el momento de compensar», apuntó la presidenta de ANPE en Ciudad Real, Mónica Sánchez de la Nieta. Se trata de una apuesta por el profesorado en aportar mejores condiciones laborales, como disminuir el horario lectivo, mejoras de conciliación o condiciones económicas. «Vamos a hacer dos legislaturas de Gobierno del PSOE y los recortes se están convirtiendo en consolidación», lamentó la presidenta de ANPE. El objetivo es mejorar «la calidad de la enseñanza y disminuir el fracaso escolar».
Por este motivo, los cinco sindicatos, STE y ANPE, con CSIF, CCOO y UGT, enviaron «un escrito los cinco sindicatos porque es el momento de negociar», apuntó Sánchez de la Nieta, quien avanzó que el curso que viene, «si no hay negociación y acuerdo», lo que sí habrá serán movilizaciones para conseguir lo que el Gobierno regional prometió hace dos legislaturas. «Lo que pedimos y exigimos es que el profesorado de Castilla-La Mancha esté al mismo nivel que el resto de España», dijo. De hecho, Sánchez de la Nieta explicó que «la única manera de reforzar la enseñanza y el apoyo a la diversidad de las aulas» es con más profesorado y si no se mantienen los cupos que han venido con el COVID podría haber una disminución de la calidad. Además, recordó que el próximo curso habrá en las aulas dos leyes educativas dentro de las aulas de la región, porque en los años impares se trabajará con la Lomloe y en los pares con la Lomce.