José Manuel Patón

LA PLUMA CONTRA LA ESPADA

José Manuel Patón


¿Y si mañana le toca a mi hijo?

23/11/2022

Solo le pido a Dios que la aplicación de la ley que pergeñan las feminosequé, les toque a sus hijos.
Nos puede tocar a todos los que tenemos hijos y hermanos, o nos puede tocar a nosotros mismos, porque la ley del 'solo sí es sí' que se publicó el día 7 de octubre pasado no responde a ninguna llamada necesaria en el mundo, sino a las medallas que se han querido poner Rita Maestre o Irene Montero. Digo yo que con la formación que tienen ambas no puedan ser unas brillantes legisladoras, porque entre sus especialidades laborales no entra la judicatura, y no se le puede pedir peras al olmo. No siendo médico, a nadie se le ocurriría meterse a operar un cáncer con laparoscopia, porque los errores no los paga el médico, los paga el operado. Podrán dar consejos de cómo entrar en una capilla con el torso al aire, única proeza que se le conoce a una, o cómo dominar la caja de un supermercado, mérito que se le atribuye a la otra. No, perdón, hay más méritos que podría exhibir una de ellas para que de la noche a la mañana la nombrasen ministra, pero no son muy confesables la verdad.
Lo que honestamente podrán y además clamar todo lo que quieran, es coger el catecismo estalinista, llamar fascista a todo el que no piense como ellas, escribir un artículo, o dirigir un mitin, porque esto es una sociedad libre y todo el mundo puede opinar, pero no directamente y a capón dictar leyes con el cuento de querer cambiar a la sociedad sin que dichas leyes estén rebozadas del más mínimo respaldo social, leyes que no han sido consultadas, y que el miedo de algunos hacen que les den el visto bueno o se pongan de perfil, no sea que te digan machista o fascista.
Me atrevo a decir esto porque la ignorancia supina que ha inspirado a los defensores de esta ley lo primero que ha conseguido ha sido rebajar las penas a los verdaderos violadores o agresores sexuales, que era algo desde luego no perseguido porque de torero se mete a albañil. Así el desastre de la ley de educación, el de la memoria histórica, la ley de identidad sexual, etc., porque gobernar con el apoyo de una mayoría de partidos dispares no da derecho a que un partido que tiene solo un 15% de los votos y que va a tener menos, te ponga las pilas en leyes, querido Sánchez.
Un poco de respeto es lo que necesitamos los ciudadanos; no es que mentir sea en sí mismo un pecado, pero mentirnos continuamente tiene que tener consecuencias políticas que son simplemente los votos a recabar. Las medallas cuando son de chocolate se deshacen con el calorcillo del propio cuerpo, y conociendo ahora que una de ellas, Rita Maestre, va a presentarse para alcaldesa de Madrid, ya veremos el porcentaje de votos que saca de la gente de la calle, y es que si Podemos fue una esperanza para los más necesitados y nació debajo de una tienda de campaña en la Puerta del Sol, prometiendo que ningún político de los suyos cobraría más de 3 veces el salario mínimo interprofesional, no se puede terminar cobrando 100.000 euros, con chales de 4 ó 5 cuartos de baño, y dejando como los sultanes en cada patio a su anterior pareja a vivir a costa de la administración para que no protesten de sus andaduras, y así nos va.