Únicamente Cataluña y la Comunidad de Madrid han iniciado el año sin unos nuevos presupuestos, a diferencia de las cuatro regiones donde hay mayoría absoluta y otras diez, más Ceuta, en las que gobiernan coaliciones o partidos en minoría, lo que habla de la estabilidad general de los ejecutivos autonómicos.

La comunidad que falta en esa enumeración es Castilla y León, que también arrancará el año con presupuestos, pero sin ley de acompañamiento, porque los dos grupos de la coalición (PP y Vox) apoyaron por error las enmiendas del PSOE y optaron después por tumbar su propio proyecto, que afecta a una parte de los ingresos previstos.

Sin Presupuestos por ahora

En la Comunidad de Madrid, el divorcio entre el PP de Isabel Díaz Ayuso y su socio preferente, Vox, ha derivado en la prórroga de las cuentas de 2022, las únicas aprobadas en los cuatro años de mandato (en dos legislaturas distintas) que acumula la dirigente popular.

Hasta principios de diciembre, todo apuntaba a que el PP y Vox pactarían los Presupuestos de 2023, pero Vox presentó sus enmiendas al proyecto fuera de plazo, el PP no quiso hacer una excepción para que la Asamblea regional las admitiera y el partido que lidera Santiago Abascal respondió anunciando su voto en contra de la propuesta, condenándola así al fracaso.

Tampoco hay nuevo presupuesto en el Ayuntamiento de la capital, donde el alcalde, José Luis Martínez-Almeida (PP), buscó igualmente el necesario respaldo de Vox, pero la exigencia de este partido de eliminar las restricciones a la movilidad en el centro de la ciudad ha impedido cualquier tipo de negociación.

En Cataluña, el Govern de Pere Aragonès ha comenzado el año con una "prórroga técnica" de sus Presupuestos, a la espera de que en las próximas semanas consiga cerrar un acuerdo con el PSC -o con JxCat, aunque su nuevo papel en la oposición lo dificulta- para recabar los apoyos necesarios para poder aprobar unas nuevas cuentas.

Aragonès ya ha cerrado un acuerdo con En Comú Podem y las negociaciones con el PSC han ido avanzando en las últimas semanas, por lo que podría repetirse el pacto entre socialistas, comunes y ERC, que ya ha permitido avalar los Presupuestos Generales del Estado y las cuentas del Ayuntamiento de Barcelona.

En Castilla y León, tras el error en la votación de la ley de acompañamiento y su posterior rechazo, esta importante norma complementaria a los Presupuestos no entrará en vigor hasta febrero o marzo a través de una proposición de ley de los grupos del PP y Vox, aunque con la previsión de que sea retroactiva y afecte a todo el ejercicio.

Presupuestos gracias a mayorías absolutas

En Andalucía, la mayoría absoluta del PP ha permitido que los Presupuestos se tramiten y se aprueben sin complicaciones, a diferencia de lo ocurrido el año pasado, cuando tuvieron que prorrogarse, lo que el presidente andaluz, Juanma Moreno, celebró como un mensaje de "estabilidad política, institucional y económica" de la región.

Las Cortes de Castilla-La Mancha aprobaron el presupuesto el 20 de diciembre, con el voto a favor de la mayoría socialista y en contra del PP y Ciudadanos; en Extremadura el 23 de diciembre, con el mismo resultado y la abstención de Unidas por Extremadura; y en Galicia, al contrario, el PP tiró de su amplia mayoría absoluta para aprobar en solitario los primeros presupuestos del sucesor de Alberto Núñez Feijóo, Alfonso Rueda.

Gobiernos de coalición estables

Los grupos que sustentan al Gobierno de Aragón -PSOE, Podemos, CHA y PAR-, aprobaron el 29 de diciembre en solitario el presupuesto para 2023, con el rechazo de PP y Vox y la abstención de Cs e IU; y en Asturias apuraron un día más y sacaron adelante sus cuentas con los votos de PSOE, IU, Grupo Mixto (ex Cs) y Podemos, frente a PP, Cs, Foro y Vox.

Los Presupuestos de Baleares para 2023 se aprobaron sin dificultad el 22 de diciembre gracias a la mayoría de la coalición de izquierdas formada por PSOE, Unidas Podemos y Més per Mallorca, y en Canarias el pacto de Gobierno de PSOE, Nueva Canarias, Sí Podemos Canarias y la Agrupación Socialista Gomera consiguieron sacar su cuarto presupuesto autonómico también sin dificultades a pesar de la oposición del PP y Coalición Canaria.

El presupuesto de Cantabria para 2023 se aprobó el 22 de diciembre con los votos del PRC y el PSOE, y el rechazo del PP, Ciudadanos y Vox, a los que no se aceptó ni una enmienda, y la Comunidad Valenciana también aprobó el suyo en tiempo y forma, a pesar de las discrepancias y tensiones existentes entre los socios de gobierno del PSPV, Compromís y Unides Podem, que acusaron a los socialistas de actuar con "deslealtad" por pactar algunas medidas con la oposición.

A diferencia del año pasado, cuando se aprobaron el 18 de enero, la Asamblea Regional de Murcia dio luz verde a los presupuestos regionales el día 29 de diciembre gracias a los votos del PP y de sus socios de gobierno (ex de Ciudadanos y Vox) y la abstención de Vox, pese al rechazo de PSOE, Podemos y Cs.

El Parlamento de Navarra lo hizo el 22 de diciembre con el apoyo de los firmantes del acuerdo de legislatura (PSN, Geroa Bai, Podemos e Izquierda-Ezkerra) y la abstención pactada de EH Bildu, frente a Navarra Suma (UPN, PP y Ciudadanos), y en el País Vasco, el Gobierno, igual que las tres diputaciones y las tres juntas generales, sacaron las cuentas adelante con el único apoyo de PNV y PSE-EE.

El Parlamento de La Rioja aprobó el pasado 19 de diciembre el presupuesto regional para 2023, pero la ley de acompañamiento se retrasó hasta el día 29, una vez que se incluyeron las enmiendas de IU.

En el caso de Ceuta, el presupuesto fue aprobado el 23 de diciembre gracias al acuerdo entre el PP, que gobierna la ciudad autónoma sin mayoría absoluta, y el PSOE, así como al voto favorable de los dos diputados no adscritos. La consejera de Economía y Hacienda, Kissy Chandiramani (PP), destacó la "altura de miras" demostrada por el PSOE para aprobar este documento.