El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, está dispuesto a reunirse con los presidentes de Murcia y Valencia y con el Gobierno central para buscar alternativas al trasvase y recordó que durante «más de dos años» en Levante se ha regado y bebido con agua de las desaladoras debido a obras en el trasvase.

En su intervención durante la presentación de la Estrategia Agenda 2030, García-Page expuso que entiende que «estén soliviantados en el Levante» porque «son muchos años acostumbrados a un recurso muy escaso». Se mostró partidario de llegar a acuerdos con Murcia y Valencia para que «la transición se produzca de manera acolchada, porque le va a interesar más a Levante trabajar en alternativas que intentar encontrar agua donde no hay». 

«Ha habido más de dos años en que se ha bebido y regado con agua de las desaladoras que una parte de la sociedad rechazó», señaló el presidente de Castilla-La Mancha, «y por eso no hay que sacar los pies del tiesto ni rasgarse las vestiduras», agrego.

Miras habla del «fin de Murcia».  El presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, ha asegurado hoy que el borrador del Plan Hidrológico del Tajo «es el fin de la Región de Murcia, de nuestro modelo productivo y de que Murcia pueda seguir aportando a la balanza comercial de España»..

En una entrevista en la Cope propuso que en otras autonomías por las que transcurre el Tajo hagan lo mismo que se ha hecho en Murcia, donde la reutilización del agua depurada alcanza el 98%, por encima de la media nacional.