El Patronato del Parque Nacional de Cabañeros se reunió hace unos días para abordar diferentes temas, entre ellos el futuro Plan de Gestión y Control de Ungulados (ciervos y jabalíes, principalmente) y que ha recibido ocho alegaciones, seis de ellas presentadas por propietarios de fincas en este espacio protegido, una por Ecologistas en Acción y otra por la Asociación de Cazadores de Canadá.
La Ley de Parques Nacionales, que entró en vigor en diciembre de 2020, establece entre sus preceptos la incompatibilidad de la caza deportiva y comercial en los parques nacionales españoles, aunque sí permite programar actividades de control de poblaciones y de restauración de hábitats. Por ello, teniendo en cuenta las características físicas y biológicas de Cabañeros y entendiendo que pudiera ser necesario el control de poblaciones de ungulados en el parque, la administración regional ha elaborado este borrador del plan de control de ungulados al objeto de determinar el procedimiento para realizar esta actividad. Un borrador que se ha sometido a información pública con el objetivo de se que formularan las alegaciones que se consideraran oportunas.
El presidente de dicho Patronato, Benito Garrido, en declaraciones a La Tribuna, señaló que las alegaciones van enfocadas, fundamentalmente, al tratamiento a la caza. Así, por ejemplo, explicó que los conservacionistas alegan que el control de animales se debe basar en datos, «constratados y fundamentados científicamente», que «demuestren que sobran ungulados», y que «no se encubra la caza deportiva y comercial con diferentes métodos». En el caso de los propietarios de fincas, continúa explicando el presidente del Patronato de Cabañeros, manifiestan que con la eliminación de la caza en el Parque Nacional «las fincas pierden valor» y «se priva de una actividad que repercute económicamente en la comarca». En las alegaciones, «los propietarios quieren que de alguna forma se pueda cazar y los conservacionistas argumentan que la caza está prohibida por ley en los parques nacionales, por lo que se deben utilizar métodos distintos y con datos constatados que demuestren que sobran animales y que estos están haciendo daño al entorno», puntualiza.
Durante el encuentro, tanto representantes del Ministerio como de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha acordaron reunirse próximamente para dar una respuesta conjunta a las alegaciones, por lo que únicamente se informó al Patronato del estado en el que se encontraba el futuro Plan de Ungulados. «En breve se dará una respuesta a las alegaciones», subrayó Garrido, quien señaló que el compromiso de ambas administraciones es «acelerar» el plan, aunque vio difícil su puesta en marcha antes de finalizar el año.
ayudas. Otro de los asuntos que abordó el Patronato del Parque Nacional de Cabañeros fue la financiación de actuaciones en las áreas de influencia socioeconómica del parque nacional. Un tema, señala Garrido, en el que tampoco se produjo ningún acuerdo, ya que tras la presentación de solicitudes ahora es el turno de la Comisión de Valoración, que analizará las solicitudes para después elaborar y emitir el Patronato un informe. Se prevé que la Comisión de Valoración se reúna en próximas fechas.
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