La rehabilitación de la residencia universitaria Francisco Nieva, ubicada en la avenida Camilo José Cela de la capital, supondrá un coste aproximado de un millón de euros, según las previsiones con las que se trabaja de cara a la licitación de esta importante actuación que tendrá como aspecto novedoso el que saldrá «en una sola licitación», de manera que la empresa que ejecute la rehabilitación pueda ser también la que se encargue de la explotación de la misma durante un periodo de 40 años.  

Así lo afirmó a este diario el director general de Universidades del Gobierno regional, Ricardo Cuevas, quien explicó que las principales obras a desarrollar en esta residencia son las que guardan relación con la accesibilidad, la remodelación de algunos espacios o la actuación de instalaciones eléctricas. No obstante, indicó que su estado de conservación, en términos generales y estructurales, «es bueno». Se prevé que cuente con más de 50 apartamentos que permitan albergar en torno a unos 200 alumnos. 

Aunque la fórmula elegida por la Administración regional es la externalización de la prestación del servicio, lo que no ha dejado de chocar en ciertos ámbitos al tratarse de un gobierno socialista, se enmarcará dentro de la red de residencias de Castilla-La Mancha y, por tanto, «a pesar de que sea una empresa la que preste ese servicio público, todo está regulado por dicha red, de manera que los precios de esta residencia estarán marcados y controlados por el Gobierno, al igual que todo lo relativo a controles de calidad o los servicios a fin de garantizar la igualdad de oportunidades en el acceso a esta residencia». 

En relación a los precios, informó de los que ya están vigentes en el modelo de residencia que ahora se desea implantar en la Francisco Nieva y que en las residencias-viviendas en habitación individual es de 213,11 euros al mes y en habitaciones compartidas de 190,96 euros€al mes. Además, aquellas familias con renta baja pueden solicitar incluso la exención del pago. 

Cuevas explicó que el modelo de apartamento de residencias universitaria ya funciona con éxito en otras dos residencias de la región y gusta- dijo- porque supone una mayor autonomía para los alumnos al contar con espacios comunes como cocina. 

El director general de Universidades confía en que «las empresas se presenten, es una muy buena oportunidad» y recordó que el campus de Ciudad Real tiene más de 7.500 estudiantes y se está todavía terminando de implantar el grado de Enología, así como varios máster, al mismo tiempo que recordó el anuncio en el reciente contrato-programa para poner en marcha en septiembre de 2023 del nuevo grado de Matemáticas, que cuenta «con unas expectativas tanto académicas como laborales altísimas, de las más altas de país». De este modo, la Junta prevé un crecimiento de entre 300 y 400 estudiantes en el campus de Ciudad Real, por lo que a su vez se incrementará la oferta de plazas residenciales. En este caso, hay que tener en cuenta que el sector inmobiliario ha venido apuntando a la escasez de soluciones habitacionales para el alquiler por la gran demanda estudiantil. 

«Es una buena iniciativa por muchos motivos, primero, porque se recupera un edificio que no estaba en uso; segundo, porque se mantiene en el ámbito universitario; tercero, porque independientemente del modelo de gestión va a plantear unos precios sociales y accesibles que cualquier alumnos   con independencia de su renta pueda tener derecho a una plaza y, en definitiva, porque buscamos un modelo de desarrollo integral universitaria». Así, confía en que para el curso 2023-2024 haya «dos buenas noticias», el mencionado grado de Matemática y la recuperación de la Francisco Nieva tras una década de abandono.