Del partido de este domingo del Yugo UD Socuéllamos se pueden sacar bastantes aspectos positivos: el primero, es que el equipo suma su tercera jornada consecutiva sin encajar gol; que enfrente tenía al segundo clasificado en la tabla, todo un CP Cacereño que está llamado a jugar por ascender; y que, a pesar de las inclemencias del tiempo, con un viento que siempre condiciona el juego en el "Paquito Giménez", el equipo de Sergio Campos nunca se achantó a la hora de llevar el dominio, de jugarle de tú a tú a los extremeños, y de ser los que más buscasen la portería contraria en su intento de desnivelar el marcador.

Es cierto que el partido se caracterizó por mucho centrocampismo, con pocas aproximaciones a las porterías, con poco que rascar para que el aficionado se levantase de su asiento para llevarse a la boca alguna jugada clara de peligro, pero también hay que reconocer que la labor de los dos equipos, con ritmo, llegadas, velocidad y proponiendo un juego de toma y daca para alcanzar la zona de peligro de cada área, dejó un buen sabor de boca al espectador, siempre teniendo en cuenta el condicionante del viento.

Los de Sergio Campos fueron los que llevaron el mando en el partido, bien plantados en defensa y en la zona media, con balones profundos para Pepe Delgado y Agudo, pero el Cacereño también mostraba que su clasificación en la tabla es más que merecida.

Javi Heranz (a la derecha) presiona a un rival. - Foto: Rocío Hellín

Así, acabó un primer tiempo más intenso en el juego pero con pocas ocasiones de gol.

Tras el descanso, la tónica apenas si varió; con un Yugo UD Socuéllamos que buscaba más el dominio del balón, con un Antonio incansable por la banda derecha, y con un Cacereño que a la ocasión que tenía demostraba que también sabía darle criterio a la pelota.

Los locales reclamaron dos penas máximas en el área de los extremeños, por una mano de un defensor visitante, que no fue señalada por un colegiado cuya labor fue protestada, y la segunda por una caída de Bayo que se saldó con tarjeta para el atacante local. Antes, en los compases iniciales, un agarrón sobre Barahona en el área cacereña tampoco fue sancionada como penalti a pesar de las protestas locales.

Eso sí, también los visitantes tuvieron la suya, sobre todo con un remate de cabeza de Traoré, el mejor de los de Julio Cobos, que hizo temblar el marco de Diego Nieves.

Al final, reparto de puntos, con un sabor agridulce para los locales, que fueron los que más propusieron sobre el campo, pero que, visto con perspectiva, es un punto bueno para un equipo que encadena tres jornadas consecutivas sin encajar gol y que sigue demostrando que va a más conforme pasan las jornadas. Que a nadie se le olvide que un punto frente a un Cacereño que está llamado a jugar play-off para ascender es un buen botín para un equipo en el que hay que depositar toda la confianza.

FICHA TÉCNICA.

VINOS YUGO UD SOCUÉLLAMOS: Diego Nieves, Carlos Martínez, Antonio, Siu, Xavi Pons (Crhistian, min. 55), David Agudo (Bayo, min. 75), Godoy (Palomino, min. 55)), Barahona (Javi Heranz, min.75), Yimi, Pepe Delgado y Toboso.

CP CACEREÑO: Alfonso, Aguado, Molina, Capa, Iván Fernández (Samu Manchón, min. 80), Ruyman, David Grande (Solano, min. 71), Telles (Clausí, min. 64), Traore, Garci (Pedro, min. 71) y El Kounni.

ÁRBITRO: Morona Del Campo, asistido por Sánchez Lázaro y López Montalbán del Colegio Madrileño. Mostró tarjeta amarilla a los jugadores locales Barahona, Antonio y Bayo; y al cacereño Aguado.

GOLES: No hubo.

INCIDENCIAS: Paquito Giménez. 800 espectadores. Mañana de buena temperatura pero condicionada por las rachas de viento. Antes del inicio del partido se guardó un minuto de silencio en memoria de Juan Pérez, abuelo del delantero local, David Agudo, fallecido recientemente.