Los diez días de luto oficial que ha vivido España concluyeron en la provincia con un minuto de silencio que fue secundado a las puertas de los ayuntamientos, a las doce del mediodía, por alcaldes, concejales, trabajadores municipales y vecinos en memoria de todos los fallecidos por COVID-19 en nuestro país, más de 1.100 en Ciudad Real. En Manzanares, el alcalde, Julián Nieva, aprovechó para apelar al «sentido de la responsabilidad» de la ciudadanía para evitar que el próximo otoño «tengamos un problema sanitario que no podamos abordar». «Mostramos nuestra solidaridad con los familiares afectados por esta enfermedad y nuestro reconocimiento a los profesionales que se han dejado la piel trabajando por salvar la vida de muchas personas», manifestó el regidor para expresar a continuación su «orgullo» por la actitud y del comportamiento de la ciudadanía. «No olvidaremos a las familias que han perdido a algún ser querido durante la pandemia», enfatizó en Alcázar de San Juan su alcaldesa, Rosa Melchor, que hizo referencia al monumento en el que ya trabajan todos los grupos municipales de la Corporación para recordar a las víctimas del coronavirus. «El luto termina pero nosotros seguiremos respetando a quienes se han ido, haciendo lo que esté en nuestra mano para hacer la despedida que merecen y respetando el dolor de las familias», sentenció. Tras el minuto de silencio en Daimiel, su alcalde comentó que «son muchas las personas que nos han dejado, que no hemos podido despedir como se merecían», y por eso expresó su deseo de poder organizar «dentro de no mucho» una despedida para todas esas personas que, desafortunadamente, han perdido la vida. Leopoldo Sierra hizo un llamamiento a la responsabilidad ciudadana de todos los colectivos y de todas las edades para seguir combatiendo el virus «protegiéndonos nosotros, porque así estamos protegiendo a los demás». No obstante, reconoció que en Daimiel se ha producido de manera generalizada «un comportamiento envidiable» que agradeció a todos. Puertollano, Valdepeñas, Almodóvar, Socuéllamos, Miguelturra y Tomelloso son otros puntos de la geografía provincial en los que se guardó un minuto de silencio con motivo de los diez días de luto por los fallecidos por COVID-19, que oficialmente concluyeron en la medianoche de este viernes.

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