La Concejalía de Urbanismo está trabajando para ultimar el proyecto de rehabilitación del Teatro Municipal Quijano de la capital, unas instalaciones que datan del año 1974 y en las que quiere aplicar mejoras de accesibilidad y de eficiencia energética en su interior.

En el mes de febrero, el equipo de Gobierno anunció que en junio el Teatro Municipal Quijano colgaría el ‘cartel de cerrado por obras’  y que la previsión era que los trabajos durarían todo el año. Sin embargo, la tramitación hace complicado que se cumplan estos plazos. La intención de Urbanismo es culminar el proyecto «de forma urgente» y sacarlo a licitación, para posteriormente hacer efectiva su adjudicación y que los trabajos comiencen lo antes posible, según informó a este diario la edil del área, Raquel Torralbo.  

De la culminación del proyecto también depende la cuantía total de las obras, aún por determinar, si bien el objetivo es que se solventen  algunas de las principales carencias que presentan estas dependencias municipales y que no se abordaron con la rehabilitación que se llevó a cabo en el año 2006.

 La principal de ellas es en materia de accesibilidad, ya que las personas que quieren disfrutar de un espectáculo tienen que ser ayudadas por el personal técnico a través de elevadores para poder salvar las escaleras, lo que les hace imposible acceder de manera autónoma.

Otro problema viene del sistema de calefacción del teatro, que cuenta con equipos muy antiguos y que hay que renovar, ya que no responden como deberían, provocando diferencias de temperaturas durante las representaciones, tal y como explicó en su día el concejal de Cultural, Ignacio Sánchez.

El concejal también señalaba otras obras que se realizarán en la caja escénica: sustitución del cableado de acero que sustenta las varas, sustitución de algunas varas defectuosas y deformadas por el paso del tiempo por trust, que son estructuras trianguladas mucho más resistentes que sustentan tanto la iluminación como la escenografía y el telón.

Además, en el resto del teatro se aprovechará para intervenir en el cuadro eléctrico y para acometer mejoras en el aislamiento térmico y acústico para garantizar un mayor aprovechamiento energético.

escenarios. La realización de las obras del Quijano iba a implicar para el área de Cultura la búsqueda de otros espacios alternativos para desarrollar obras teatrales y espectáculos, si bien ahora también hay que tener en cuenta la nueva realidad que impone la pandemia por el COVID-19. De momento, la desescalada impone limitaciones en cuanto al aforo y las medidas de seguridad en los eventos culturales, una cuestión que se tendrá que analizar y ver también cómo evoluciona dentro de unos meses, cuando el Quijano esté ‘cerrado por obras’.