José Rivero

Doble Dirección

José Rivero


Carrizales del tiempo

15/12/2021

Contrapone Juan Benet su par analítico Estampa y Argumento dos resultados opuestos, fruto de estrategias narrativas diversas dictadas por la prioridad de su eje vertebrador. «Lo que parece evidente es que el narrador ante todo y sobre todo se apoya en el eje del tiempo para establecer el régimen de su discurso y que jamás confiará al espacio la política del orden– la Estampa será siempre territorio primordial del pintor, por lo mismo que el Argumento constituye patrimonio básico del narrador». Con eso podríamos establecer que las artes temporales gobernadas por el eje del tiempo pueden mostrar su entera libertad en la ordenación del espacio; frente a la fijeza del tributo especial que gobierna las artes espaciales, liberadas por otra parte de la pesada carga del devenir del tiempo. Concluyendo tal equilibrio con la afirmación de que «mientras el pintor ha de tener siempre sujetas las riendas del espacio, pudiéndose mover a su entera libertad por los carrizales del tiempo».
Viene ello a cuento con la consideración derivada del cartel oficial de la Navidad 2021, que firma César Ramírez y que llama Rey de Reyes, como la película de 1961 de Nicholas Ray, y que nos presenta una clara diacronía festiva de difícil cumplimiento. Una Sagrada Familia –usual en representaciones pictóricas de la Natividad–con las alteraciones visibles en la ocasión que se rememora. Aparece acompañada –no por pastores y animales domésticos, buey y mula– sino por las figuras egregias de los reyes castellanos Alfonso X y Juan II. Y sólo unificada la visión por los ángeles de gloria asomados al copete de la composición.
Reyes castellanos que, más allá de sus tributos y afectos con la ciudad que los acoge, están separados en su biografía por cerca de 200 años, de la misma manera que la Sagrada Familia aposentada en la cara sur de la Puerta de Toledo –pieza del recinto defensivo de la ciudad– está separada trece siglos de la edificación que los cobija, en una suerte de fenomenal trampantojo, sin que ello sea óbice para su agrupamiento. De igual forma que las siluetas del continuo edificado del fondo –referidas a piezas levantadas con posterioridad del momento fundacional– arrojan dilataciones temporales más amplias aún que las citadas.
Esa suerte de compresión/dilatación del tiempo puede tener cabida en el soporte pictórico del cartel, merced a los pactos de la Estampa y su ruptura del marco temporal. Pero rara vez ese desajuste del tiempo se avendría con el hilo temporal ordenado de un relato, urgido por la coherencia de su transcurso inaplazable.