En 2019 llegaron a las farmacias los primeros dos medicamentos para dejar de fumar: Champix y Zyntabak, dos marcas que se convirtieron en claves para muchos fumadores a los que la voluntad no les bastaba para dejar el cigarrillo. Ambos medicamentos fueron retirados por contaminación y entonces en 2021 empezó a comercializarse Todacitán, otro medicamento con Citisina, que ayuda a dejar el tabaco, pero con un problema, su coste, casi 200 euros. A principios de febrero de este año, el Ministerio de Sanidad incluyó este medicamento entre los financiados, su coste pasó a 116 euros, y en apenas días desapareció de las farmacias, fruto del desabastecimiento.

«Cuando el Ministerio lo aprobó hubo un boom de tratamientos», explicó la neumóloga Patricia Mata, encargada de la consulta de deshabituación tabáquica en el Hospital General Universitario de Ciudad Real. El desabastecimiento ha hecho que no se pueda recetar y recordó que en Ciudad Real se lleva ofreciendo desde noviembre de 2021 a quienes acuden a la consulta, señaló la doctora. La idea, según avanzan desde la Agencia Española del Medicamento, es que el 20 de marzo, el próximo lunes vuelva a estar disponible en las farmacias.

La consulta de deshabituación  del hospital hizo un estudio sobre la toma de estos fármacos con Citisina entre una muestra de pacientes. El resultado es que aproximadamente el 50 por ciento había dejado de fumar tras su uso, tratándose de personas que consumían más de una cajetilla de cigarrillos al día.

«El mecanismo y acción del Todacitán es parecido al Champix», lo que implica que en 25 días se deja de fumar tomando unas seis pastillas al día, con una pauta que se va modificando por horas y días. «En la unidad se lo ofrecíamos a los pacientes porque es una herramienta que venía bien», indicó Mata, quien apunta a que por la consulta acudieron muchas personas con el cambio de financiación preguntando por el fármaco.

Mata recordó que hay muchas personas interesadas en dejar de fumar en la provincia, la agenda de la consulta está cerrada y hay una lista de espera larga, citándose, ahora mismo, para noviembre, excepto a aquellos «pacientes prioritarios», como los oncológicos o los que tengan cardiopatías. Mata recordó que es importante hacer intentos previos, antes de acudir a la consulta especializada.