El turismo rural marca un récord de visitantes

R. Chávarri
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Ciudad Real registró los mejores datos de turistas y pernoctaciones entre junio y agosto y anticipa al mejor año para el sector como destino de interior

Una turista toma el sol en un establecimiento rural de la provincia. - Foto: Rueda Villaverde

Si en los hoteles el pasado verano fue el segundo mejor para el sector turístico en 15 años, en las casas rurales el pasado verano fue, directamente, el mejor de la historia. Nunca antes las casas rurales de la provincia recibieron a tantos visitantes ni sumaron tantas noches de hotel como las que el INE contabilizó durante la pasada campaña estival: más de 15.000 turistas que eligieron Ciudad Real como destino y más de 38.000 pernoctaciones.

Un año sobresaliente para el sector en la provincia que supera todos sus récords. Si el año pasado marcó el camino de la recuperación tras el impacto de la crisis del coronavirus en el turismo, este año es el de la confirmación. Ciudad Real es una de las 18 provincias de España que marcan el verano de 2022 como el que más turistas recibieron, once de ellas son de interior y cinco son de Castilla-La Mancha. Todas. Ayer, el Gobierno de Castilla-La Mancha sacaba pecho y destacaba que la región lidera en el conjunto del país el incremento en el número de viajeros alojados en establecimientos de turismo rural y se convertía en la segunda comunidad autónoma con mayor crecimiento en el número de pernoctaciones rurales registradas en el mes de agosto.

Así lo señaló la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, al respecto de los datos sobre ocupación de alojamientos extrahoteleros que ayer daba a conocer el Instituto Nacional de Estadística, que sitúan, además, a Castilla-La Mancha en cifras récord en los ocho primeros meses del año en el conjunto del alojamiento turístico reglado, casi un dos por ciento por encima de las cifras del mismo periodo de 2019, que sigue siendo el año récord del turismo en la región.

En Ciudad Real, la recuperación del turismo rural es evidente y no se limita en exclusiva al periodo estival. Durante los ocho primeros meses de 2022 han pasado por este tipo de establecimientos casi 30.000 personas, 5.000 más que el mejor año para estos alojamientos, y se han anotado más de 72.000 pernoctaciones, 14.000 más del que hasta ahora era el mejor año.

Eso supone, por ejemplo, disparar la estancia media de los turistas en casas rurales. Casi tres días en agosto en un momento de boom por este tipo de turismo en la provincia. Este año, por primera vez, se han superado las 2.000 plazas estimadas a disposición del turista, con otro récord de establecimientos abiertos, 227, cuatro veces más de los que había en 2005, y un grado de ocupación que durante los fines de semana se disparó hasta rozar el 45%, ligeramente por debajo de los datos de 2021 o de 2020. En cuanto al empleo que se genera en esta actividad económica, también crece, hasta casi las 300 personas contratadas para trabajar en una casa rural de la provincia.