Rescatan a 2 niños de la inmundicia y detienen a sus padres

Pilar Muñoz
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El progenitor ha sido encarcelado, la mujer está en libertad con cargos y los menores de 4 años y 16 meses han quedado bajo la tutela de la Junta ante su aspecto físico y el estado de la casa

Rescatan a 2 niños de la inmundicia y detienen a sus padres

No se sabe el tiempo que llevaban sin comer ni beber agua cuando agentes de la Policía Local les rescataron al acceder a una vivienda de Manzanares tras recibir la llamada de un vecino alertando de que un niño de unos tres años estaba asomado a la ventana de un tercer piso con  riesgo de precipitarse al vacío y de que se oían llantos de otro menor provenientes del interior de la vivienda.

Así lo han relatado a La Tribuna fuentes cercanas a la investigación e instrucción de la causa abierta a raíz de los hechos destapados el pasado 4 de noviembre. Poco después eran detenidos los padres, una pareja de origen rumano de 31 y 35 años residentes en Manzanares.

Él ya está en prisión acusado de un delito de abandono de menores y otro de quebrantamiento de orden de protección. Ella ha quedado en libertad con cargos. Los menores, un  niño de cuatro años y una niña de 16 meses han quedado bajo la tutela de la Junta de Comunidades tras retirarles a los padres la custodia.

Cuando los agentes pudieron acceder al piso encontraron al niño llorando, nervioso, en estado de ansiedad, descalzo y con restos de alimentos en la ropa. La vivienda estaba a oscuras y dentro se encontraba una niña de 16 meses, también llorando, descalzada como su hermano y con restos de vómitos en la ropa. El niño sólo acertó a decir su nombre y que su madre estaba en el parque sin poder responder a nada más.

Los agentes consiguieron calmarlos, mientras comprobaban el lamentable estado en que se encontraba la vivienda, insalubre.

Según el informe y las imágenes de la vivienda, a las que ha tenido acceso La Tribuna, en la cocina de gas butano había una olla con restos de comida quemada y un cuchillo de grandes dimensiones al alcance de los niños, sobresaliendo de la encimera.

En la mesa del comedor igualmente había restos de alimentos, yogures y bollería, así como colillas de cigarrillos. En medio de tanta suciedad, ropa esparcida por los muebles y el suelo.

Las ventanas de algunas habitaciones estaban abiertas y los agentes pudieron constatar el riesgo de caída del menor al ver el cuarto donde encontraba cuando fue visto desde la calle. La cama está pegada a la pared donde está la ventana con gran peligro para los niños de caer al vacío desde una altura de unos nueve metros.

 No se sabe el tiempo que llevaban los pequeños sin comer ni bebe agua, aseguran a este diario las fuentes.