Después de una 'semana blanca' a causa del Carnaval y de la imposibilidad de utilizar las instalaciones deportivas de la localidad, causa por la que se aplazaba el partido que debió jugar la pasada joirnada contra Torrijos, el Atlético Tomelloso retoma la competición liguera en el Grupo XVIII de la Tercera RFEF visitando uno de los campos más complicados de la competición, el San Marcos de Quintanar del Rey, feudo de uno de los aspirantes al ascenso de categoría. Un partido que comenzará a las 16.30 horas del domingo con el arbitraje de Martínez-Osaba Escudero.

No le vino bien al Atlético Tomelloso este parón, después de encadenar una victoria y un empate en un buen momento de forma de los hombres de Raúl Lara, que desde que llegó al banquillo solo han cedido derrotas ante el primero y el segundo, Manchego e Illescas, empatando con Azuqueca, Villarrobledo y Tarancón, y ganando a Calvo Sotelo. Pese a ello, su situación en la tabla sigue siendo extrema, penúltimo a diez puntos de la permanencia, con un partido menos jugado.

La única baja en los tomelloseros será la del sancionado Joaquín, y la buena noticia podría ser la reaparición cinco meses después de Juanda, ya recuperado de su edema óseo en un pie. Raúl Lara tiene claro que su equipo ya ha demostrado que "no somos ninguna cenicienta" y que acudirán a Quintanar a "intentar ganar el partido y agarrarnos a los pocos clavos que nos quedan", porque insiste en que sus jugadores aún piensan en la posibilidad de lograr la salvación. "Iremos allí a seguir picando piedra, a agarrarnos a donde podamos y a intentar sorprenderles", afirma el técnico tomellosero, que reconoce que su equipo no ha preparado este partido como debería por la falta de disponibilidad de instalaciones deportivas en Tomelloso.

En el choque de la primera vuelta se imponían los quintanareños por 2-4.