Bolaños debatirá el próximo 22 de marzo, en Pleno, los presupuestos municipales de este año, que ascienden a algo más de 12,5 millones de euros, lo que significa una partida ligeramente inferior al pasado ejercicio, cuando se aprobaron unas cuentas de trece millones de euros. Unos presupuestos, afirma el alcalde bolañego, Miguel Ángel Valverde, que mantienen un  «alto nivel de inversión», con 2,8 millones de euros en su apuesta por hacer una ciudad mejor con «inversiones transformadoras de la ciudad en tiempos muy difíciles». Y con ese reto, se contempla el sector urbanístico del ferial por 1.178.000 euros, el nuevo cementerio, además de la puesta en marcha de la primera fase de la ciudad deportiva con 350.000 euros y la puesta en valor del Castillo de Doña Berenguela con otros 350.000 euros, cuyo uso se «contabilizará con el desarrollo de diferentes actividades culturales». Sin duda, señala Valverde, unos presupuestos «bastante ambiciosos en cuanto a inversión» y en los que una vez más, incide, se hace «un importante esfuerzo en amortización a deuda con más de 800.000 euros derivado de los préstamos que hubo que pedir a principios de la legislatura de 2011 para pagar a proveedores y que han tenido que devolverse en muy poco tiempo».  

El proyecto, elaborado por el equipo de Gobierno, recoge también el capítulo de Personal, que suma casi 4.700.000 euros en el que se incluyen las «subidas salariales de los empleados públicos aprobadas y establecidas en la Ley General de Presupuestos del Estado». Y todo, «garantizando la prestación de todos los servicios públicos y manteniendo, incluso en ocasiones hasta aumentando, las transferencias a entidades sociales, culturales, deportivas y económicas para el desarrollo de sus actividades en tiempos en los que la pandemia «ha reducido sus ingresos».      

Y por décimo año consecutivo se vuelven a congelar los impuestos municipales salvo la subida de la tasa de agua, que «tenemos obligación de hacerlo por contrato», y la de la basura «al haber subido el coste del servicio por RSU al Ayuntamiento». Unas cuentas que también contemplan ayudas directas a los sectores más desfavorecidos por la pandemia como es el caso del comercio, la hostelería y otras actividades minoristas a los que se les intentará ayudar con la supresión del cobro de algunas tasas como la de las terrazas o de otras como la de la basura. Ajustes, explica Valverde, que se llevarán a cabo con la incorporación del remanente de 2020, que «aunque aún no está cerrado será positivo y se destinará a habilitar ayudas económicas a esos sectores más debilitados o desfavorecidos a causa del confinamiento y las restricciones por el COVID-19».      

El equipo de Gobierno presentó su proyecto hace ya unos días en la comisión de Hacienda y Valverde confía en que la posición apoye estas cuentas y se aprueben por unanimidad. «No tenemos necesidad de ese apoyo para sacarlas adelante (el Grupo Popular gobierna en mayoría), pero sería muy bueno para los bolañegos que se aprobara con todos los votos de la Corporación, por lo que vamos a intentar acercar posturas», manifiesta.