Más incertidumbre para la Semana Santa de Ciudad Real

M. E.
-

La limitación de grupos a cuatro personas y el toque de queda a las 22 horas anunciados para esos días limitarían aún más la celebración de una Semana de Pasión sin actos en la calle

Cuatro hermanos de Las Palmas, en su balcón durante la Semana Santa 2020. - Foto: Tomás Fernández de Moya

A menos de tres semanas para la celebración de la Semana Santa de Ciudad Real, las hermandades la afrontan anteponiendo la ilusión a la resignación en una edición que, por segundo año, estará tremendamente condicionada por la situación sanitaria. El mes pasado el obispo ya anunció la suspensión oficial de las procesiones y todo tipo de actos en la vía pública en toda la provincia. Además, Sanidad podría ratificar esta semana nuevas restricciones específicas para este periodo, como reuniones de un máximo de cuatro personas y toque de queda a las 22 horas, lo que hará más difícil aún que cofrades, hermanos, devotos y seguidores en general vivan como desean esta Semana de Pasión.

En la Asociación de Cofradías de Ciudad Real, estas nuevas medidas sanitarias no han hecho sino ahondar en el sentimiento de incertidumbre con el que están conviviendo en los últimos meses. Aunque ya estaba asumido no procesionar por las calles, las hermandades sí tenían planificados algunos actos de culto interiores en sus respectivas parroquias, como viacrucis o funciones en días señalados, para poder disfrutar de la cercanía física de sus titulares, aparte de la espiritual. Además, la Asociación estaba preparando una exposición para mostrar en el recién remodelado Guardapasos o en algún museo de la ciudad. Planes que la semana pasada quedaban aún más en el aire. Descartado también el pregón a cargo de Julián Sánchez Mora, al menos sí se confía en poder realizar una discreta presentación del cartel y de la guía.

Su presidenta, Yolanda Gómez, lamenta esta situación y espera que en los próximos días se despejen algunas incógnitas, sobre todo en lo que se refiere al límite de cuatro personas por grupos y al toque de queda: «Había programados actos de culto en Jueves Santo y Viernes Santo a las 22 horas, y supongo que habrá que adelantarlos».

Ante esta situación, desde la Asociación de Cofradías se envía un mensaje de «esperanza» a todos los hermanos. «Esto es como una penitencia que cada uno se puede tomar a su manera. No debemos perder la esperanza y acordarnos de todo lo que hemos perdido durante este tiempo, sobre todo muchas vidas, además de sueños y vivencias. Tenemos que luchar todos a una para salir de aquí, pero con responsabilidad», sentencia Gómez.

Sea como fuere, las hermandades estarán al lado de sus imágenes y pasos todo lo que las normas sanitarias se lo permitan. Como sentencia el hermano mayor del Prendimiento, Mariano Ureña, «si no podemos acompañar a nuestros titulares en la calle, tendremos que ir a estar con ellos a sus casas».

En este sentido, el hermano mayor del Nazareno, Javier Sánchez Abarca, apunta que para el devoto es muy importante también «alimentar el espíritu» con la proximidad física con el titular, y le pedía a Dios que la normalidad vuelva en 2022 «porque otra Semana Santa ‘perdida’ sería muy duro y provocaría el desánimo, porque el espíritu de la Semana Santa es algo que cuesta ganar y que se puede perder con facilidad».

Vocación de caridad. Pese a esta situación, las hermandades no han dejado de trabajar durante el año, centrándose en su vocación caritativa, en unos momentos de tanta necesidad para muchos ciudadrealeños. Un ejemplo es la Hermandad del Nazareno, que ha logrado recaudar cerca de 6.000 euros que ha donado a las Hermanas de la Cruz. «Las hermandades estamos para ayudar a los que más lo necesitan», recuerda su hermano mayor.

También ha realizado durante este año una gran labor social la Hermandad de Las Palmas, con donaciones de alimentos y monetarias a las familias más necesitadas. Unos meses muy intensos a los que no podrá poner el broche de oro que deseaba durante la Semana Santa. Al menos, intentarán «mantener el espíritu vivo», como apunta su hermano mayor, José Manuel Moreno, con su campaña ‘Ofrece la Palma al Señor’ para que los hermanos compren una hoja de palma con la que adornen sus balcones y ventanas, para después ofrecerla al Señor en la misa del Domingo de Ramos. 

En cualquier caso, todas las actividades que se puedan celebrar serán ofrecidas a través de las plataformas digitales de las hermandades, que durante este año han dado un paso adelante con las nuevas tecnologías para poder acercar a los hogares de los ciudadrealeños el espíritu de la Semana Santa, declarada de Interés Turístico Nacional en 2006.