La entrada a Puertollano desde la N-420 ha mejorado su imagen y accesibilidad con las obras de urbanización del margen izquierdo con una inversión de 45.600 euros con cargo al Plan de Obras Municipales de la Diputación Provincial.

Unos trabajos que se han terminado con la instalación de báculos y luminarias led al objeto de mejorar en seguridad de viandantes y conductores que transitan por el entorno del hotel Verona y la gasolinera San Cristóbal. Una actuación que ha conllevado la creación de un acerado hasta ahora no existente de enlace entre el Pau II y el centro deportivo Javier Bermejo.

“Estamos contentos porque no solo habilitamos un lugar que no existía para el uso y disfrute de los vecinos y también embellece la entrada desde Ciudad Real y dar mayor seguridad con la iluminación, explicó el concejal de obras y mantenimiento, Jesús Caballero, que considera que era una obra necesaria ya que enlaza ambas rotondas a la vez que se ha renovado la red de agua y se evitan roturas en la zona.

Se ha delimitado los accesos a través de la construcción de un acerado de una anchura de dos metros y sesenta centímetros en el arcén de la carretera, con el fin de hacer más seguro el acceso al establecimiento hotelero y gasolinera.

El proyecto se ha completado con la instalación de puntos de luz con báculos de 12 metros de altura de columna troncocónica de chapa de acero galvanizado y luminaria de fundición, así como la señalización vial horizontal en las zonas de cruce y pintado en el pavimento.