Brillante pasado y preocupante futuro para el balonmano

Manuel Espadas
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El veterano periodista Luis Miguel López alerta sobre la difícil situación que se va a encontrar el balonmano tras la crisis sanitaria

Brillante pasado y preocupante futuro para el balonmano

Recordar gloriosos momentos del pasado del deporte español está siendo la aplaudida terapia que canales temáticos como Teledeporte están ofreciendo a los aficionados, y un protagonista destacado de estos históricos capítulos está siendo el desaparecido BM Ciudad Real, club que dominó el balonmano mundial durante la primera década del siglo. Y el hombre que más goles del conjunto manchego ha cantado, primero como profesional de TVE con su particular ‘adentro’, y después como director general del club (2007-2011), fue Luis Miguel López, que pasa estos días de confinamiento en su domicilio de Madrid, además de esperando con inquietud el inminente nacimiento de su primera nieta, volviendo a paladear estas joyas del 40x20, sin dejar de disfrutar de su gran pasión, pese a que todas las ligas europeas se mantienen congeladas, algunas incluso ya dadas por finalizadas.

De los grandes momentos que ha ‘desempolvado’ Teledeporte, el periodista ya jubilado se queda con la remontada en el Quijote Arena ante el THW Kiel alemán en la final de la Champions 2009, en un partido «apoteósico» y unos últimos quince minutos «históricos» ante una afición que fue clave. Tampoco olvida el «recital tremendo» de Talant Dujshebaev en el Palau, en la final continental que se perdía en 2005.

Volver a visionar estos partidos, junto a la final de la Liga de Campeones 2006 contra el Portland San Antonio, primera de las tres que se adjudicaban los ciudadrealeños, o el primer título mundial de la selección española en Túnez 2005, le han llevado a la conclusión del cambio que ha experimentado este deporte en estos años, cuando «antes apenas se botaba el balón, con pase tras pase y más ritmo, y ahora es más físico».

pesimista. El regusto de estos recuerdos se le amarga al castellonense cuando visibiliza el futuro inmediato que le aguarda al balonmano cuando las autoridades den por superada la crisis del coronavirus. Luismi López es claro: «Estoy muy preocupado. Los clubes ya vivían al día antes de esto, incluso con deudas, y no sé cómo van a salir adelante. Los clubes están aplicando ERTE a jugadores que ya eran casi mileuristas. Tengo serias dudas de si todos los clubes que estaban antes de la epidemia van a estar después porque ya estaban muy tocados. Como sucede con las personas, este virus puede ser letal en un deporte con una enfermedad crónica que en otro más sano y fuerte».  «En Asobal quedarán muchos equipos amateurs», resume.

En cuanto a la posible reanudación de las competiciones, López se muestra escéptico y optaría por «declarar la temporada nula, sin títulos ni nada, en blanco, como si no hubiera existido. Habrá perjudicados, pero en esta situación perjudicados somos todos. No vamos a preocuparnos de eso ahora. Además, lo haría en todos los deportes, como recuerdo para el futuro de lo que estamos pasando».