El hombre sencillo

C. de la Cruz
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Manolo García comienza su gira 'Acústico' en el Teatro Quijano de Ciudad Real en un ejercicio de intimidad, ensoñación y fraternidad en el que «hacer más habitable» un mundo «duro e inhumano

Manolo García posa para 'La Tribuna' en el Teatro Quijano - Foto: Rueda Villaverde

Cualquier otro hubiera asumido sin pestañear su notoriedad, pero Manolo García habla de «responsabilidad» al conocer que las entradas para los dos conciertos que ofrece en el Teatro Quijano se agotaron nada más salir a la venta. Lapidario, afirma que «la vanidad es el adorno de los necios», por lo que deja a un lado cualquier tentación de orgullo para incidir en la sencillez, un Manolo García al descubierto que arranca su gira más íntima en Ciudad Real con Acústico.

Con una trayectoria impecable a sus espaldas, el cantante barcelonés se olvida de anteriores puestas en escena para afrontar por primera vez en su carrera un formato precisamente acústico donde «canto mejor porque estoy más relajado». Pájaros de Barro y otros grandes éxitos, además de temas de El último de la fila, se revisarán en el escenario. Atrás quedan mitos como el artista encerrado en la torre de marfil. Manolo García canta para «dar consuelo, no arreglamos el mundo, pero lo hacemos un poco más habitable».

No en vano, reconoce sentirse preocupado por «el cambio climático, por el planeta que vamos a dejar», pero también «cuando se negocia y malversa dinero de los ciudadanos, cuando se piensa en el beneficio y lucro de unos pocos, cuando se rescata a los banqueros con el dinero de todos y no a los ciudadanos de a pie, a las personas con enfermedades raras, familias desasistidas con hijos con problemas, cuando se ejecutan desahucios por beneficio de un banco... todo eso no me gusta ni tampoco y a mucha gente».

El hombre sencilloEl hombre sencillo - Foto: Fotos Rueda VillaverdeEn su crítica a un mundo «inhumano y duro», la responsabilidad recae también en un «cuerpo político que debe dejar de pensar en la poltrona, en las encuestas, en salvarse... y el que llegue a dejar de pensar en intereses de partidos y pensar en el ciudadano».

El próximo 28 de abril se celebran elecciones generales y Manolo García pide «a los políticos que sean honestos y trabajen por sus conciudadanos para dejar atrás corruptelas, robos, marrullerías, salidas por la puerta falsa, ahora te mandamos aquí a este sitio o al otro, a Bruselas...limpiamos la cara, hacemos un partido nuevo... La clave es la justicia social, mirar por los de abajo, que son los que están solos, desposeídos».

En definitiva, Manolo García apuesta por «hacer algo más fraterno». Siguiendo la letra de su canción, Nunca es tarde para «empezar a intentar cumplir cualquier sueño. Hay que pretender vivir con calma y paz espiritual, de una vida en la que cada día brille el sol». A partir de las 21.30 horas en el Quijano, un concierto repleto de humanidad.