Ciudad Real recibió este jueves a sus Majestades los Reyes Magos de Oriente, Melchor, Gaspar y Baltasar, con ilusión y sin restricciones, en una multitudinaria cabalgata que recuperó el recorrido completo que se realizaba antes de la pandemia.

A las seis y media de un tarde gélida, la comitiva real, compuesta por alrededor de 800 personas, partió desde el Parque de Gasset y recorrió Puerta de Alarcos, Alarcos, Plaza del Pilar, Ramón y Cajal, General Rey, Mata, Pozo Concejo, Avenida del Torreón, Palma, Plaza de San Francisco, Ruiz Morote y Carlos Vázquez antes de su entrada triunfal en la plaza Mayor, abarrotada de niños y mayores.

Melchor, Gaspar y Baltasar saludaron a todos los ciudadrealeños desde lo alto de sus flamantes nuevas carrozas, construidas para la ocasión por integrantes de diferentes colectivos de la ciudad y artistas. Este año, como novedad, los pajes repartieron, a pie de calle, más de mil kilos de dulces, 22.000 bolsas de gusanitos y obsquios, como estuches y lapiceros. No obstante, en algunos tramos del recorrido, también lanzaron caramelos y otros regalos desde las carrozas.

cabalgata de los reyes magos - Foto: Tomas Fernandez de Moya

Los más pequeños disfrutaron de una tarde mágica sin saber que, además de los regalos que dejen esta noche en sus hogares, encontrarán en sus mesas un obsequio especial de Sus Majestades de Oriente cuando regresen a clase el próximo lunes.

Un grupo de pajes reales a patín y otro a lomos de caballos de cartón precedieron al rey Melchor, que saludó con afecto a la multitud de personas, grandes y mayores, que aguarba su llegada a lo largo de todo el recorrido. Zancudos, malabaristas o elefantes de colores dieron paso a la carroza del rey Gaspar y animaron un desfile que avanzaba al son de canciones modernas y villancicos tradicionales. Como manda la tradición, el rey Baltasar, solemne, cerró la cabalgata.

Sus Majestades se bajaron de las carrozas en la plaza Mayor, donde saludaron a todos los vecinos de Ciudad Real antes de iniciar el reparto de juguetes y regalos en todos los hogares de la capital. Allí fueron recibidos por la alcaldesa, Eva María Masías, y el resto de la Corporación municipal, que antes de la llegada de los Reyes Magos repartieron cientos de balones entre los asistentes.

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El rey Melchor tomó la palabra para agradecer el cariño de la gente, especialmente de los más pequeños: "Nos habéis recibido con alegría y con una sonrisa maravillosa". Gaspar y Baltasar destacaron la bonita iluminación de la plaza, que les sirvió de guía para llegar desde el cielo a la capital manchego, y afirmaron, para terminar, que el año de espera ha merecido la pena.