El Quijote Arena volverá a vivir esta tarde una de las citas más esperadas de la temporada, con la visita del que posiblemente es el equipo con más nombre y tirón para los aficionados, el Barça B.

Un duelo que, además, este año se presenta muy igualado, con los dos conjuntos en similares circunstancias. No en vano, manchegos y catalanes están empatados a puntos y no atraviesan por su mejor momento, sobre todo el filial azulgrana, que acumula cinco derrotas y un empate en las últimas seis jornadas. En su último compromiso el equipo entrenado por Roi Sánchez perdía en su pista con el Atlético Novás (29-30), mientras que los de Javier Laguna caían goleados en Antequera (33-24) en una de sus peores actuaciones.

El precedente de la primera vuelta no fue nada bueno para los de Ciudad Real (35-29), pero ahora el Vestas Alarcos tendrá como gran aliada a su afición y la necesidad imperiosa de sumar para no complicar más su situación en la tabla.

La gran novedad es el regreso a la convocatoria casi tres meses después del pivote Juan Lumbreras, con su rodilla ya en condiciones de competir, y que dará un necesario respiro al sobreutilizado Carles Asensio. El que no estará es Victoriano Alises, con una lesión muscular, lo que supone un serio problema para Javier Laguna dada su polivalencia en la primera línea.

El Barça B, máximo goleador y máximo goleado de la competición, será «un  rival muy complicado, con un gran lanzamiento exterior, con dos grandes extremos como Mamadou y Pasqui, con transiciones muy rápidas… Te arrastra con su ritmo, con el doble de posesiones que un equipo normal», analizaba Laguna, que apostaba por «ser nosotros» para poder controlar un partido con mucha velocidad. Su máximo goleador es el extremo izquierdo Pau Oliveras (88), que ya ha debutado en la Liga Asobal con el primer equipo, y en la portería destaca el exalarquista Fran Revuelta, que en las últimas fechas ha perdido algo de protagonismo.