La jornada electoral celebrada ayer en los centros educativos para elegir a los representantes sindicales durante los próximos cuatro años se saldó en la provincia con la victoria de Anpe, con 13 delegados, por lo que se mantiene como primera fuerza sindical sumando, además, dos delegados más con respecto a los que logró en 2018. Está seguido del STE, con 10 delegados, lo que supone el doble que hace cuatro años, cuando obtuvo cinco, mientras que CCOO se mantiene con seis representantes y CSIF pierde dos, ya que en esta ocasión ha obtenido seis.

   La gran novedad llegó también de la mano de UGT, que ha perdido los tres delegados que tenía y se ha quedado sin representatividad en la junta de personal docente de la provincia, ya que al no alcanzar el mínimo del 5 por ciento exigido, desaparece en la configuración de sindicatos de educación de la provincia. 

El número de votos registrados en este proceso de elecciones sindicales en la provincia fue de 4.093 de un total de 7.222 electores, lo que supone un 56,67 por ciento de participación, casi tres puntos menos que en los pasados comicios, cuando se situó en el 59%. «Nos hemos mantenido como primera fuerza sindical y hemos ganado a pesar del descontento que hay en los docentes por la carga de burocracia que sufren y los años de pandemia», dijo la presidenta provincial de Anpe, Mónica Sánchez de la Nieta, calificando como «positiva» la victoria y asegurando que les motiva para «seguir trabajando» por mejorar las condiciones de los docentes. 

En la región, Anpe sumó 56 delegados; STE, 43; CCOO logró 27; CSIF, 26;y UGT, 9.