Los 22 componentes del Coro de Cámara Oretania acaban de regresar a Ciudad Real con la satisfacción de haber obtenido dos medallas de oro en el Concurso Internacional de Canto Coral de Tokio, que se celebró entre los días 29 y 31 de julio en la capital japonesa.

El grupo manchego alcanzó las máximas distinciones en las categorías de coro de cámara y música contemporánea, las únicas en las que competía de las siete en las que se subdivide el certamen.

El grupo ciudadrealeño midió sus voces y su forma de interpretar contra agrupaciones de Japón, Indonesia, Filipinas y Egipto, refiere su director, Daniel Báñez, quien destaca que el jurado estaba compuesto por maestros y compositores que son "las mayores eminencias del mundo en el canto coral que han estado juntas en la misma mesa escuchándonos y valorando nuestro trabajo", como el finlandés Jaako Mäntyjärvi. Este jurado se basaba en diferentes parámetros medidos de forma objetiva con lo que su calificación servirá para que Oretania intente el futuro hacer subir aún más sus calificaciones.

Oretania se hace doblemente de oro en Japón

Báñez resalta que este certamen, en el que participaron 54 agrupaciones diferentes, "es como un mundial de fútbol" y se rige por unas estrictas normas de valoración objetiva en diversos apartados que los participantes alcanzar. Así refirió que la valoración del jurado "nos permite saber que cosas tenemos que mejorar". El director comenta que la participación en este certamen "es complicadísima por la cantidad de factores que afectan", el primero de ellos, el coste económico, presupuestado en 42.300 euros, que se han cubierto sin ningún tipo de ayuda por parte de las administraciones públicas. Un esfuerzo económico que se cubrió con los "ahorros" del coro y de sus propios integrantes.

El también compositor e intérprete lírico, subraya que este año el coro se encuentra "en un momento óptimo de forma", por lo que aplazar su participación en esta cita a otro año, una vez recibida la carta de aceptación por parte de la organización "podría significar que no saliera la cosa como ha salido, lo que queríamos era vivir una experiencia única al más alto nivel", remacha.

El director de Oretania señala: "Nunca sospechamos que íbamos a conseguir los dos oros; esperábamos tener la posibilidad de aspirar a algún tipo de medalla, en alguna categoría", de hecho el grupo cuenta con una larga ristra de premios internacionales en sus casi 25 años de historia. Todo ello hace que para él sea "incomprensible" que los responsables culturales en las distintas escalas administrativas "hayan mirado para otro lado".

Oretania se hace doblemente de oro en Japón

El concurso cuenta, además de con las actuaciones ante el jurado, con otras intervenciones fuera de concurso en diferentes escenarios en las que el grupo manchego hizo gala de sus orígenes, con diversas piezas representativas del folclore español e instrumentos como las castañuelas que siempre soy muy bien recibidos por el público japonés. Fue en una de estas actuaciones donde los cantantes ciudadrealeños se ataviaron con camisas blancas y pañuelos de hierbas para entonar el Himno a la pandorga compuesto por Javier Segovia a 11.000 kilómetros de distancia en los mismos días en que en Ciudad Real se estaba celebrando la fiesta. A ello se suma la obligada referencia literaria, "con piezas compuestas ex profeso basadas en El Quijote", con la intención de "reflejar nuestra cultura al otro lado del mundo".

El repertorio con el que Oretania intervino en la parte oficial contaba además con una característica única que se mantiene en todas sus actuaciones, "siempre llevamos algo escrito por nosotros", en este caso, la pieza Kraken, compuesta por el propio Báñez. Además, esta intervención 'de concurso' venía marcada por los requisitos que exigía la organización, "en el apartado de música de cámara pedía música del barroco, una pieza obligada que llevaban todos los grupos y otra obra en latín que al público le encantó". La parte dedicada a música contemporánea incluyó otra canción obligatoria, otra pieza de carácter religioso, "con mucha complejidad" y por una obra nueva sumamente arriesgada y cuyo éxito les hizo sentirse "con mucho orgullo, refiere el director.

El certamen incluyó una última actuación en el acto de entrega de medallas en la que los ciudadrealeños actuaron "mucho más relajados" con toda la felicidad que les daba haber obtenido los máximos galardones a los que aspiraban.

Oretania se hace doblemente de oro en Japón

Para llegar a este punto el grupo tuvo que cumplir los rigurosos requisitos de entrada que exige el gobierno japonés, sobre todo por motivos sanitarios y alternar la realización de los diferentes trámites con un exigente programa de ensayos a lo largo de cinco meses.

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