A la misma hora en que el Viña Albali comenzaba sus entrenamientos de pretemporada, la Liga Nacional de Fútbol Sala (LNFS) anunciaba que David Ramos, técnico de los vinateros, había sido elegido como mejor entrenador de la temporada 2019-20. Un reconocimiento que el preparador madrileño quiso hacer extensivo a todos los integrantes de su cuerpo técnico, a sus jugadores, al club y a la afición. “Estoy muy contento, pero esto es un premio de todos, así que les estoy muy agradecido”, recalcó Ramos, que recordó que lo importante “es seguir dando pasos y escribir de nuevo las páginas de la historia más brillante del club”.

En relación al inicio de la pretemporada, poco más de un mes de disputar la final por el título liguero, Ramos admitió que “no estamos acostumbrados a tener tan poco tiempo de descanso, pero a la vez ya teníamos ganas de volver a la pista, reencontrarnos y jugar partidos”.

En estas primeras sesiones el objetivo será “ir retomando el tono físico, pero también recobrar las sensaciones con el balón. La preparación ha cambiado mucho en los últimos años y ahora ya todos los ejercicios se hacen prácticamente con la pelota”. De lunes a jueves habrá doble sesión de entrenamiento y el viernes trabajarán por la mañana, para descansar el fin de semana. El primer amistoso será el miércoles 12 de agosto en Valdepeñas ante el Levante, uno de los equipos que más se ha reforzado para la próxima campaña. Tanto entrenamientos como amistosos serán a puerta cerrada.

En cuanto a la plantilla, que ha sufrido las bajas de Pablo Ibarra, Terry, Buitre y Manu García y las incorporaciones de Sergio González, Xavi Cols y Matheus, Ramos confesó que “tenemos un buen equipo. Mantenemos prácticamente todo el bloque y ahora lo que nos preocupa es que los nuevos cojan cuanto antes la idea y la identidad del equipo. Al que quizá más le pueda costar es a Matheus por el idioma, la cultura...”.

De cara a la campaña que viene avisa que “el listón está muy alto” y advierte que la Liga vuelve a ganar en competitividad e igualdad. “Todos los partidos van a ser muy igualados y a cara de perro. Aquí nadie va a regalar nada y hay que estar a la altura y exigencia de este club y su entorno. Si queremos lograr cosas importantes y volver a estar en las fases finales hay que ser muy exigentes en el día a día”, vaticina.

Sobre la opción de reforzar la plantilla, afirmó que es “complicado, pero el club sigue trabajando y no cierra las puertas a nada. Si surge alguna oportunidad que nos dé algo diferente y entre dentro de las posibilidades del club se valorará”.

Además, lamentó no poder contar con el apoyo del público: “Estamos deseando también sentir su apoyo por todo lo que nos dan y nos aportan”, concluyó.