Crece el número de mujeres asistidas tras sufrir una violación

Hilario L. Muñoz
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Desde la puesta en marcha del programa Contigo, en el año 2018, medio centenar de personas en la provincia han pedido apoyo al programa del Gobierno regional, 14 de ellas en lo que llevamos de año 2022

Cada vez son más las mujeres que deciden denunciar los abusos sufridos. - Foto: Rubén Serrallé

La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha ha atendido en 2022 a 14 mujeres de la provincia de Ciudad Real que han pedido apoyo psicológico tras haber sido víctimas de una violación. Se trata de personas que han llegado, en los primeros cinco meses de este año, al programa Contigo, una iniciativa de la Consejería de Igualdad y del Instituto de la Mujer que comenzó a finales de 2018 y que desde su inicio no ha parado de crecer en personas atendidas, «ofreciendo una atención psicológica especializada» gracias a «una psicóloga experta en violencia sexual», según expuso la delegada de la Consejería de Igualdad, Manuela Nieto. Se trata de un servicio de atención psicológica a mujeres abusadas sexualmente en cada una de las capitales de provincia. 

La delegada recordó que este recurso «se puso en marcha porque Castilla-La Mancha tiene una legislación que protege a las mujeres» y que está, «por delante, de la legislación estatal». En este sentido, señaló que en 2018, con la nueva ley de violencia de género, la Ley para una Sociedad Libre de Violencia de Género en Castilla-La Mancha, se recogen «otras manifestaciones de violencia que sufren las mujeres» y con ella llegaron estos recursos dirigidos a acompañar a las mujeres en esas otras manifestaciones, «como son las agresiones sexuales, cuando es la pareja o de la ex pareja». «Con que este servicio lo utilizara una mujer se dará como bien hecho y aplicado en la mujer», indicó. Hay que tener en cuenta que el presidente de la Junta de Comunidades, Emiliano García-Page, avanzó durante el día de la región que a este recurso se sumará, en breve, la puesta en marcha de centros de atención integral dirigidos a mujeres que han sido agredidas. 

Solo en los primeros tres meses del año se han notificado 19 delitos de abusos sexuales en la provincia, cinco de ellos con penetración. Se trata del mayor dato de agresiones con penetración de los últimos años, no así de abusos, cuya estadística, al menos en el primer trimestre del año, tocó techo en 2020, con 27 denuncias. Por lo tanto, esas 14 mujeres que han pedido apoyo no se trata de las últimas denunciantes, sino de personas que han sufrido abusos a lo largo de su vida y que, ahora, han decidido dar el paso de hablar de ello, independientemente de que haya habido denuncia judicial o no. Nieto apuntó que su valoración es que «hay un incremento de denuncias», por una parte, y que se trabaja también «en la sensibilización y la prevención de estos abusos», por otra. Por lo que «no es que haya más agresiones» sino que «se denuncian» y ahí más mujeres que dan el paso de llevar ante la justicia lo ocurrido, lo que «es positivo».

datos desde 2019. Desde el inicio del programa Contigo se ha atendido a más de medio centenar de mujeres. Hubo 19, en 2019, y 24, en 2021. Durante 2022 son 16 las mujeres atendidas, pero dos llevaban en tratamiento desde el año anterior. Nieto recordó que estas mujeres llegan a la atención psicológica por derivación del centro de la mujer o porque han llamado a la Línea de Atención Permanente, al teléfono 900 100 114. «Las derivaciones vienen por parte de los profesionales» tras conocer que han sufrido un abuso reciente o en algún momento de su vida, y deciden que es mejor su derivación a «este servicio especializado». 

El único requisito para entrar en Contigo es que sean mujeres mayores de 18 años y residentes. Por lo tanto, no es indispensable el empadronamiento para recibir este apoyo psicológico, lo que es «fundamental», al dar opciones a atender, por ejemplo, a «mujeres jóvenes que vienen a vivir a la comunidad» y que si sufren una agresión podrían recibir apoyo psicológico.

Nieto recordó que la atención se suele ofrecer en la capital, pero «cuando ha habido algún caso muy sensible», la profesional acude al lugar de la víctima para «hacer una primera intervención». «Son las profesionales las que indican cuándo se le puede dar de alta» a estas mujeres, dijo Nieto. Se da el tiempo que necesitan «para hacer su recorrido y poder salir», igual que ocurre con una casa de acogida. La media de atención es del «año», pero hay algunas que «el profesional estima que tiene que estar más tiempo».