Francisca, "ejemplo de libertad y que invita a reflexionar"

La Tribuna de Ciudad Real
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Aldea del Rey acoge la representación de la obra 'Francisca', la historia de la primera mujer que logró en España una sentencia de divorcio por maltrato

Francisca, "ejemplo de libertad y que invita a reflexionar"

José Luis Villanueva, alcalde de Aldea del Rey, asistió a la representación teatral de Francisca, que tuvo lugar en La Casa de la Música aldeana. El regidor estuvo acompañado por la delegada de la Junta en Ciudad Real, Carmen Olmedo, la delegada provincial de Igualdad, Manoli Nieto, la concejala del área de Mujer e Igualdad, Araceli Valbuena, y el concejal de Cultura, Cándido Barba.

Villanueva dijo sentirse emocionado con la obra y aseguró que Francisca Pedraza es un "ejemplo de libertad y que invita a reflexionar sobre la dureza de la violencia machista". Para el edil aldeano es "lamentable que cuatro siglos después aún esté tan de actualidad". Por su parte la delegada de la Junta en Ciudad Real, Carmen Olmedo, ha destacado como la cultura puede servir para difundir y dar a conocer a mujeres que han marcado parte de la historia de España.

La obra, financiada por el Gobierno de Castilla-La Mancha, recorre el arco vital de su protagonista (Francisca de Pedraza, Alcalá de Henares, 1600), la primera mujer que, después de sufrir maltrato, consiguió ganar una demanda de separación por violencia dentro del matrimonio. La pieza dramática, sustentada en testimonios reales, pretende, en su entorno, trazar el recorrido entre los lazos invisibles que unen aquella historia con la de tantas mujeres que hoy día padecen esta violencia, y plantear interrogantes vitales a los espectadores como a la sociedad, sobre la pérdida de libertad a todos los niveles que padece quien recibe el maltrato, y como esta situación aberrante inunda todos los ámbitos de su existencia, a nivel relacional, psicológico, moral o vital.

Pero Francisca también pretende dejar encima del escenario los interrogantes necesarios para que, como sociedad, hagamos una lectura común de los hechos, y nos sentemos delante de nosotros mismos a leernos, una sociedad que no quiso ver los que sucedía a plena luz del día y a puertas abiertas, delante de una mujer que tuvo que interponer cinco demandas de divorcio, hasta que su grito de auxilio fue tenido en cuenta.