PODEMOS está haciendo una reflexión porque en general la marea baja y sube, pero el problema es que esta vez no hay marea. Ni un solo diputado en Galicia, y una bajada de vértigo en el País Vasco, que de haber estado hablándole de tú al partido nacionalista en las elecciones del 2016 a sacar media docena de diputados, es para hacérselo mirar. ¿Por qué esa bajada? El que tuviera la fórmula sería adivino y podría ganar las siguientes elecciones aplicándola. Pero me da la sensación de que el chalet de Iglesias, los grandes sueldazos que se están poniendo, los enchufes a su esposa, y el hecho de que no hayan cumplido su promesa de limitar sus ingresos a 3 veces el salario mínimo interprofesional, los ha convertido en la casta que ellos mismos combatían. En el País Vasco, para radicales ya estaban los de Bildu, que son además de nacionalistas, también estalinistas y representan a la izquierda radical. Si con PODEMOS la cosa no ha cambiado nada, ni ha mejorado la situación de la izquierda radical pura y dura, ¿Para qué votarles? En Galicia la gestión moderada de FeijoÓ ha dado muchos frutos, y Galicia está mejor que nunca. La misma pregunta: ¿Para qué votarlos, para que se sienten en una poltrona como han hecho? Al final la gente no es tonta, y PODEMOS era un sueño para los perroflautas, pero la realidad ha sido solo para ellos. Coches, chalets, guardaespaldas, asesores enchufados … Salirse del bipartidismo ha sido interpretado por los que han votado hasta ahora como un grave error. Los antiguos partidos políticos tenían ya repartidos los puestos de los enchufados y cada vez que aparece otro partido político en escena, necesita más enchufados, porque tiene que pagar a sus ayudantes, a sus colaboradores, etc. de alguna manera, y eso significa más gastos de los políticos. Por si fuéramos pocos parió la abuela. ¡Virgencita que me quede como estaba!, han dicho los gallegos. Mensaje también para el PP: ganan los moderados y los buenos gestores, pierden los alborotadores y los que hacen promesas sin cumplir. Los votantes tienen un poco de alzhéimer pero alguna memoria les queda. Ni PODEMOS ni CIUDADANOS son necesarios. Los dos gastan más dinero y no nos dan nada a cambio. PODEMOS alborota el gallinero sin ninguna expectativa, y en cuanto a CIUDADANOS pudo demostrar ser un partido con personalidad votando a Sánchez cuando estaba Rivera, y hubiera conseguido un Sánchez moderado, pero su cabezonería puso a Sánchez en manos de Iglesias.
Sánchez se está radicalizando, porque todo se pega menos lo bonito, y tampoco le han dado un premio que digamos. Bildu, ese partido nacido de una loba, ha sabido hacerse publicidad, y hoy le pisa los talones al partido nacionalista. El PNV es una derechona rancia y que huele a humo de los altares y a sotana de jesuita desde lejos, y sin embargo el PSOE «de Iglesias», que es la versión más anticlerical del PSOE, lo terminará apoyando.