Afanion se reactiva

Diego Farto
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El establecimiento de la calle Huertos vuelve a abrir sus puertas con todas las medidas de seguridad en un momento en el que la ONG busca formas de volver a recaudar fondos

Un cliente cierra su adquisición en el mostrador de la tienda de Afanion. - Foto: Rueda Villaverde

Los voluntarios de Afanion están muy atentos a quien entra y sale e la tienda solidaría Mi sonrisa, puesto que deben estar pendientes de cualquier persona que acceda al local limpie la suela de sus zapatos en la alfombrilla higienizante que han puesto a la entrada y de que se limpien las manos con el gel hidroalcohólico. Además es obligatorio el uso de mascarillas y el pomo de la puerta se limpia después de cada uso, por dentro y por fuera.

Rosario Ciudad, una de las voluntarias que atienden al público en el local de la calle Huertos e integrante de la directiva de la asociación reconoce: «Fuimos los primeros en cerrar y uno de los últimos en abrir, porque funcionamos con voluntarios y no hemos querido hacerles correr un riesgo»; así a los de más edad no se les ha incluido en este reparto de turnos. 

Otra de las medidas de seguridad de esta reapertura es la no recepción de material donado para vender en la tienda, puesto que tampoco se permite que los compradores se prueben la ropa, mientras que en el caso de los libros sólo se sacan de la estantería cuando se van a adquirir. La atención al público se realiza con mascarilla y pantalla protectora y la manipulación de los artículos a la venta se realiza con guantes.

Ciudad subraya la buena acogida del público ante esta apertura, pues a pesar de la limitación del aforo (sólo pueden permanecer dos compradores en el local) «no les importa esperar y tener que hacer cola en la calle». Ya desde hace algunas personas «a los voluntarios y los trabajadores sociales nos preguntaban que cuándo se abría», precisa Ciudad.

Entre estos compradores se encuentra Dorotea Ramírez, quien explicó a La Tribuna que es compradora habitual del establecimiento, donde adquiere prendas de ropa a un precio accesible, pero también ha encontrado utensilios y pequeños muebles para su vivienda.

La reapertura de la tienda llega en un momento económicamente delicado para Afanion. La organización dedicada a presta servicio a niños afectados de cáncer y sus familias, por efecto de la cuarentena se ha quedado sin las aportaciones que le proporcionaban sus numerosas actividades públicas en diferentes localidades. «Estamos buscando ideas para volver a tener actividades», comenta Rosario Ciudad.