El Viña Albali Valdepeñas ya forma parte del selecto grupo de equipos que disputará la Copa de España. El equipo de David Ramos no tiene límites y conquistó un colosal triunfo ante un Barça que pagó su mal inicio y que cuando reaccionó se encontró con la rápida respuesta de un cuadro valdepeñero cuya fe es inagotable. El pabellón Virgen de la Cabeza vivió una noche mágica que será recordada mucho tiempo y que engrandeció su historia y también la del fútbol sala.
La diferencia de intensidad en el arranque de partido fue abismal. El Barça no debió entender en qué pista estaba jugando y se vio superado en todas las facetas por un Viña Albali que salió a morder desde el primer instante. Avisaron Juanan, Cainan y Chino, antes de que en un córner Pablo Ibarra entrara con todo al segundo palo para traducir en el marcador el dominio azul. Ni por esas espabiló el cuadro azulgrana, que tardó cinco minutos en aproximarse tímidamente al área de Edu Sousa. El Viña Albali olió la sangre y se lanzó a la yugular, descerrajando el segundo tiro en el marcador con un potente chut de un Pablo Ibarra en estado de gracia.
Cuando Daniel y Sergio Lozano comenzaron a querer circular el balón, el resultado ya era de 2-0, pero los manchegos cortocircuitaban una y otra vez la creación de juego del rival. Andreu Plaza, técnico del Barça, no encontraba la fórmula y llamó al orden a los suyos porque Juanjo había evitado que la brecha fuese para entonces aún mayor.
Pero claro, el Barça puede despertar en cualquier momento y redujo diferencias en un pase cruzado de Dyego al segundo palo que Chino, en su intento de despejar, introdujo en su propia portería.
A seis minutos para el descanso se produjo el debut de Manu García en Liga y no faltó el susto cuando, en un mal pase de Edu Sousa , Rivillos estrellaba el balón en la madera. Para entonces los colegiados comenzaban a exasperar a los locales, que vieron su tercera amarilla en cuatro faltas. Entre gritos de ¡Sí se puede! y los abucheos a la pareja arbitral los dos conjuntos se retiraron a los vestuarios, con la sensación de que ese 2-1 era un premio que se antojaba algo corto para los méritos de unos y otros.
Tras la reanudación, se repitió la historia. El Viña Albali volvió a salir en tromba, aunque a diferencia del primer periodo, le faltó la pegada. Y el portero Juanjo tuvo buena parte de culpa de ello. Dani Santos se animó incluso a ejecutar su ya mítica chilena tras un envío largo de Edu Sousa y lo cierto es que los minutos pasaban sin que el Viña Albali rematase en varias ocasiones a su rival, abrumado ante la intensidad manchega.
Si perdonas, lo pagas y en una de las escasas aproximaciones azulgrana, Adolfo firmó el 2-2. Quedaban ocho minutos de auténtica angustia y el choque se rompió. Daniel le daba la vuelta al marcador con un tiro cruzado y en el córner originado por la quinta falta del Barça José Ruiz restablecía la igualada. A 2.56 se la jugó el Barça con portero-jugador y el Viña Albali forzó la sexta falta en el inicio de la contra. Chino no faltó a su cita con el gol para hacer el 4-3. Quedaban segundos de sufrimiento, pero el triunfo ya no se escaparía. Viña Albali jugará la Copa de España y por méritos propios, tras ganar al Barça y a ElPozo y empatar con el Movistar Inter. Un ‘matagigantes’ que no atisba sus límites para delirio de una afición que sueña en grande.