Cooperativas Agroalimentarias de Castilla-La Mancha se suma a la petición de 'sus superiores', Cooperativas Agroalimentarias de España, de realizar una destilación de crisis de vino tinto. En este caso, la petición no ha partido de la región, sino de otras comunidades autónomas, como Extremadura y La Rioja, que ven necesario que se active esta medida excepcional de regulación del mercado.
«Nos solidarizamos con el resto», afirmó el director general de Cooperativas Agroalimentarias de Castilla-La Mancha, Juan Miguel del Real, quien indicó que en este caso la región «no tenía una necesidad imperiosa de pedirla con urgencia», si no que había apostado por «la prudencia» a la hora de poner encima de la mesa esta medida aún reconociendo que el mercado de vino, sobre todo de tinto, está «un poco lento».
Sin embargo, ahora que se ha abierto la puerta a esta opción para retirar parte del vino del mercado, Del Real considera que «si la destilación sale a un precio muy barato, no será atractiva; pero si sale a un precio razonable sí habrá más bodegas que la pidan». Y es que ahora se deben seguir los siguientes pasos antes de que sea una realidad, en el caso de que así suceda. Primero, Cooperativas Agroalimentarias de España lo ha pedido a la Interprofesional de Vino y ahora ésta lo debe elevar al Ministerio de Agricultura, que será el organismo que decidirá si le da carta blanca o no y en qué condiciones.
Por tanto, de momento no hay ni un volumen a destilar ni un precio al que pagar esa destilación. Y desde la región también se ve un riesgo: «Que sea muy barata y que lleve al mercado a la baja, a un suelo en los precios», sobre todo ahora que, aunque con salidas lentas, hay un incremento del valor de las ventas en el exterior, un 26,4 % más, a una media de 61 céntimos el litro.
Sin embargo, hay dos factores que han llevado a Cooperativas Agroalimentarias de España a 'activar el botón rojo' de la destilación: el stock y la bajada del consumo. «Tras analizar la situación que atraviesa el sector, se considera imprescindible solicitar una destilación de crisis para el vino tinto, al igual que ha realizado Francia», informa en un comunicado en el que añade «desde 2020 el sector vitivinícola se ha visto gravemente afectado como consecuencia de la pandemia. Cuando ya parecía que comenzaban a reactivarse las ventas, la guerra de Ucrania, el alto incremento de los costes de producción y de la energía, la dificultad de acceder a vidrio y otras materias primas, han provocado un parón en el mercado nacional e internacional. A todo ello hay que añadir, además, la importante caída del consumo en España, un 8% en el último año, debido a la inflación».
La petición de las cooperativas se suma a la realizada esta misma semana en un encuentro a dos bandas entre Coag y el Ministerio, en el que la organización expuso que existe un «pronunciado desequilibrio» entre oferta y demanda que no se solucionará ni tan siquiera con una posible merma de la cosecha si no llueve. «El stock está por encima de la media de otros años», indicó Victoriano Alhambra, de Coag.