Fran López: «Para ser feliz hay que ser valiente»

Hilario L. Muñoz
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20.000 ejemplares de sus libros, sin librerías y vendiendo a través de su web, estas son las cifras de Fran López, un solanero que dejó su trabajo de contable para cumplir su sueño

Fran López: «Para ser feliz hay que ser valiente» - Foto: Tomás Fernández de Moya

Gracias a una amplia red de seguidores en redes sociales que pidieron Perdona, ¿tienes fuego?, Lo que escribí antes y después de ti y Mi vida da para una serie, las tres novelas publicadas hasta ahora en Círculo Rojo y que se pueden adquirir solo en franlopezcastillo.com. López explicó la semana pasada cómo lo hizo en su facultad, Derecho. 

¿Por qué se deja un trabajo de contable por la literatura?

Como contable solo tenía dos caminos, o ser un contable raso o ser un jefazo, para lo que hay que trabajar mucho, llevando el ordenador hasta en las vacaciones. Como ya empezaba a acumular seguidores en redes sociales y me decían que les gustaba lo que escribía, empecé a cavilar si intentaba vivir de escribir. La idea fue madurando de 2015 a 2017 y la ejecuté. 

¿Lo dejó de un día para otro?

Terminé el borrador de mi primera novela, Perdona, tienes fuego, lo imprimí en la oficina y con el borrador en la mano me presenté en el despacho del jefe, le agradecí la confianza y le dije que «no eran feliz en el trabajo y que había escrito un libro y que iba a intentar vivir de lo que escribía», tenía un plan para ello. 

¿Qué se va a encontrar quien se acerque a sus libros?

Mis tres libros giran sobre la idea de que para ser feliz hay que ser valiente. No sabemos cuánto tiempo vamos a estar aquí, no podemos esperar a después. Tampoco hay que coger los ahorros y quemarlos esta tarde. Hay que intentar vivir de cara a que en el futuro te vaya a ir mejor, pero siendo feliz hoy. Quien lea mis libros se va a sentir motivado a cuestionarse si es feliz, si el trabajo que tiene es el que quiere. 

¿Cómo vende 20.000 libros?

Trabajando muy duro, de lunes a domingo para empezar, y estando siempre formándose porque todo cambia. Por ejemplo, en redes sociales en 2010 estaba el Tuenti, en 2016 el Facebook y ahora es el TikTok. Cada red social tiene una forma de comunicar y la audiencia cambia. Tienes que estar siempre adaptándote al cambio, porque hay cosas que se quedan obsoletas. La continua formación, mucho trabajo y que te guste, porque, si no, no lo aguantas. 

Esto muestra que la marca personal funciona... 

A día de hoy es un hecho que la marca personal es todo. Es una evolución de esa idea de las redes sociales. Ocurre como con los currículum que ya están desactualizados, si presentas uno, eres uno más, pero si eres un profesional que estás en las redes sociales aportas algo más. Yo no tengo porqué hacer un curriculum a una editorial muy gordo, puedo decir que soy Fran López Castillo, que he vendido 20.000 ejemplares por mi cuenta y preguntar si me ofrecen algo. Yo llevo el mercado detrás de mí. Tengo un mercado, no tienen por qué ir a buscarlo. 

Además, como escritor se muestra que la cultura y la economía van unidas, ¿no?

Hay que saber de todo. Puedes ser una máquina escribiendo, pero si no entiendes de economía o de vender, no vas a poder vivir de la literatura. También es al revés, si eres una máquina vendiendo, pero no sabes hacer la o con un canuto, no vas a poder vivir. La única manera de aunar todo es que te guste, si no estás siempre poniéndote y con voluntad esto se acaba. 

¿Cuántas veces le preguntan cómo se puede seguir su ejemplo y cuántas personas hay en la literatura que trabajen de esta manera?

Me lo preguntan a diario y hay pocas personas, porque no todo el mundo está capacitado para ello. Es complicado, hay que saber escribir bien, vender, la web, la publicidad, el Photoshop y ser buen jefe, saber delegar y ser paciente. Hay tantas habilidades a dominar que no es fácil.