El mercado medieval regresa con timidez

Diego Farto
-

Los 75 puestos previstos se reparten entre la plaza del Pilar, calle General Aguilera, plaza Mayor y la calle y los jardines del Prado

El mercado medieval regresa con timidez - Foto: Tomás Fernández de Moya

Las banderolas y los tenderetes se extienden de nuevo por el centro urbano para el regreso del mercado medieval de Ciudad Real, que este año cuenta con una previsión de 75 puestos, inferior a los más de 90 con que funcionaba en los últimos años antes de la suspensión por la pandemia en 2020.

El organizador del mercado, Gregorio Berjaga, reconoció que varios de los vendedores que estaba previsto que acudieran este fin de semana a la capital, «se echaron atrás la semana pasada por unas previsiones que daban lluvia para estos días».

El mercado se inaugura esta tarde, a las 17.30 horas, por la alcaldesa, Eva María Masías, con su habitual reparto entre la plaza del Pilar, la calle General Aguilera, la plaza Mayor y la calle y los jardines del Prado, con actividades de artesanía, alimentos, vestuario, perfumes, orfebrería y otros.

Los espectáculos contarán con la aportación musical del grupo Wyrdamur, un habitual de la feria que pondrá sus gaitas y tambores al servicio de un sonido que definen como brutal folk. Las animaciones correrán a cargo de la Asociación de Recreación Histórica Batalla de Alarcos y Danza Oriental Alarcos, mientras que el Circo Culipardo realizará una exhibición de danza aérea en la plaza Mayor. Los niños contarán con su habitual espacio de juegos tradicionales en El Prado.

La mayoría de los puestos estaban ya instalados ayer. Entre ellos, el de César Nieto, llegado desde Úbeda (Jaén), en la que es su primera presencia en el mercado medieval de Ciudad Real, «aunque la ciudad ya la conocía». Su oferta es de mojitos elaborados con productos naturales «sin alcohol o con alcohol», con más de quince variedades de sabor.

Quien ya había trabajado en el mercado medieval de Ciudad Real anteriormente es María Teresa, de Cádiz. Ayer colocaba en sus perchas «ropa de diseño exclusivo, elaborada con tejidos naturales y totalmente artesanal».

Para los amantes de orientalismo y lo oculto, la parada puede ser el puesto de Siete Chakras, un establecimiento de Pinoso (Alicante), una de cuyas titulares, Pilar Leal, define como «de venta de inciensos y esoterismo», donde venden productos llegados de India, Nepal y otros puntos de Asia, además de algunos productos artesanales, como pulseras que han sido elaboradas en España.