Cine

LA ESPÍA ROJA Suspense

Sinopsis oficial

Joan Stanley es una encantadora anciana que jamás ha levantado ningún tipo de sospecha… hasta que una mañana agentes del MI5 llaman a su puerta para llevársela detenida. Ha salido a la luz uno de los mayores casos de espionaje del KGB y Joan es una de las sospechosas.

Durante el interrogatorio Joan vuelve a los años 30, cuando estudiaba Física en Cambridge y se enamoró de un joven comunista, Leo Galich el mismo que tiempo después, durante la II Guerra Mundial, le puso ante una difícil encrucijada: elegir entre traicionar a su país o salvar al mundo de una catástrofe nuclear.

Crítica La crítica - Por J.M.S.

Los británicos se quedaron asombrados cuando, en el año 1999, descubrieron que una apacible anciana llamada Melita Norwood, que vivía en el municipio de Bexleyheath, al sudeste de Londres, estaba considerada la espía británica más importante del KGB. Una agente doble apodada ‘Hola’ quien, desde el año 1937, y durante cuarenta años, había pasado mensajes a la Unión Soviética, los más relevantes cuando trabajaba en la Asociación Británica de Metales No Ferrosos.

  Tras leer la novela de Jennie Rooney sobre esta figura, fue el director teatral Trevor Nunn (responsable de representaciones tan importantes como Los Miserables o Noche de Reyes) quien se entusiasmó con la compleja vida de Melita que encerraba en sus vivencias emocionantes elementos ideales para ser trasladados al cine; un relato de espías donde se mezclaba drama, romance, situaciones peligrosas y, desde luego, graves dilemas morales, desde el momento que Melita, Joan en la película, optó por traicionar a su país.

   El arranque de la película nos presenta a una Joan anciana que es detenida por el MI5 (Servicio de Inteligencia de Reino Unido) debido que han salido a la luz unos documentos de la KGB que la señalan como una espía de la Unión Soviética. Durante el interrogatorio, la mujer recuerda los años 30, cuando  estudiaba Física en Cambridge, y se enamoró de un joven comunista, Leo Galich, el mismo individuo que unos años después la convenció, mientras ella trabajaba en un puesto como científica en la elaboración de la bomba atómica,  para pasar secretos nucleares a la URSS.

  Rodada en localizaciones de Cambridge, de Londres y alrededores, la película cuenta con una inestimable puesta en escena.  Igualmente está bien interpretada en las dos fases de la vida de la protagonista, juventud y vejez, por Sophie Cookson y Judi Dench.

   El desarrollo del relato, desde las primeras imágenes, apuesta por justificar el peligroso papel jugado por esta mujer quien dejo claro, al ser detenida en el año 1999, que lo había hecho porque, tras observar la barbarie de Hiroshima, se sintió de algún modo responsable y porque creía que, con sus revelaciones nucleares a la URSS, podría conseguirse un equilibrio de fuerzas para salvar al mundo de cualquier posible uso futuro de esa terrible arma de destrucción masiva. Lo que llevaría a muchos a afirmar: ¡líbrenos Dios de los idealistas! si estos deciden, de motu proprio, vender a su país, según ellos, por un interés general.

   Si la ingenuidad de la  protagonista de este film resulta, en algunos momentos, un poco increíble,  lo que sí está bien entretejido cinematográficamente es cómo lo hizo y los personajes que pululaban  interesadamente a su alrededor en la Guerra Fría. 

Compartir en Facebook
Compartir en Twitter
Duración: 101'
Director: Trevor Nunn
Reparto: Sophie Cookson, Judi Dench, Stephen Campbell Moore Tom Hughes y Terza Srbova
Género: Suspense
Nacionalidad: Reino Unido
Año: 2018
LA ESPÍA ROJA
+16
Portada La Tribuna de Ciudad Real