Cómo ha evolucionado el número de alumnos de la Facultad de Educación en estos últimos años?

Se mantiene el número de estudiantes, aunque hemos tenido un pequeño recorte en la medida en que en la Universidad antes teníamos cuatro grupos de Primaria y dos Infantil y nos han quitado dos grupos, uno de Infantil y uno de Primaria. En ese sentido, se ha recortado un poco, a pesar de que la demanda en Educación Infantil sigue siendo muy alta y teniendo una nota de corte de un 7.

¿Considera que podrían seguir atendiendo esa demanda?

Sí, sería además nuestro deseo, que ningún estudiante se quedase fuera de nuestro centro.

¿Cuántos estudiantes se han quedado fuera de esos grupos?

No lo podría decir con exactitud, pero sí que podríamos hablar de unos 30 estudiantes o más, que tienen buscarse una segunda o una tercera opción, que nunca les complace y que a mí tampoco me complace que tengan que hacerlo.

¿Hay una petición formal al Rectorado para tratar de volver a asumir esos grupos?

Ahora mismo no la hay en el sentido en el que, dada la crisis, nos han recortado a las facultades. Somos cuatro Facultades de Educación, en los campus de Ciudad Real, Abacete, Toledo y Cuenca, y en Ciudad Real y Albacete nos han hecho este recorte, pero en Cuenca y Toledo, al tener menos estudiantes, les han hecho un recorte aún mayor, con lo que, en principio, estamos a expensas de que termine la crisis...

¿Cómo ha afectado la crisis al alumnado?

Ha afectado en algo muy grave en la medida en la que muchos estudiantes han tenido que abandonar la carrera por esta causa y ahora estamos viendo si hay un pequeño arreglo con estas becas que está dando la Universidad. Por otro lado, este centro también está dando becas de colaboración, lo único es que, al bajar el presupuesto de nuestro centro, también hemos tenido que bajar el número de becas de colaboración para nuestros estudiantes.

En este contexto, ¿cómo acoge su elección como decana de la Facultad de Educación?

Lo acojo con un gran entusiasmo porque llevo trabajando 38 años en este centro. Vine muy joven de Madrid y me instalé en Ciudad Real como profesora en este centro. Mantengo con este centro una relación de amor profundo y la verdad es que lo afronto con mucha ilusión. Además, estamos en un momento muy interesante porque creo que es el momento de que estas facultades empiecen a ser reconocidas y valoradas como se merecen. Por tanto, tengo muchas ganas de trabajar.

¿Cómo podrían lograr ese reconocimiento que reclaman?

En primer lugar, a mí me gustaría que estas facultades de Educación fuesen conocidas, puesto que no se ama lo que no se conoce. Por tanto, pediría que se conocieran y que se abandonase el tópico de que para ser maestro o maestra hace falta sólo un Bachillerato, como se hacía en tiempos que ya todos queremos olvidar, o al menos yo... Otra forma de abordarlo, y espero hacerlo en breve, es con la plantilla de profesorado que tenemos en la actualidad en este centro, ya que un 80 % del profesorado es a tiempo parcial, son asociados. Así no se puede llevar a cabo una revalorización o una consideración en igualdad con el resto de las facultades.

Y quiere abordar esa cuestión  próximamente...

Sí, pero con mucha inquietud además porque la Aneca va a pedirnos la valoración de la acreditación de la validación de nuestros títulos y como tengamos esta plantilla, difícilmente vamos a llegar.

¿Cómo tiene que ser ese proceso de cambio?

Ese proceso debe ser a partir de consensuar y hablar con el Vicerrectorado del Profesorado, explicando claramente nuestra circunstancia y haciendo un análisis comparativo con el resto de facultades de este mismo campus. Empezaremos a partir de septiembre para ver esa posibilidad de cambio en la plantilla.

¿Es una cuestión que atañe entonces al Rectorado?

Sí, si estuviera en nuestras manos, lo haríamos de manera inmediata.

¿En otras facultades no es tan elevado el porcentaje del profesorado asociado?

En absoluto, creo que somos la facultad con mayor índice de profesorado a tiempo parcial. (Más información en la edición impresa)