Antonio López, listo para estrenar

D. F.
-

Ha realizado, en colaboración con el artista almeriense Andrés García Ibáñez, obras para Melilla y el Museo de Murcia

Antonio López, listo para estrenar - Foto: Pablo Garcia Ibanez

El artista tomellosero Antonio López tendrá en las próximas semanas la ocasión de inaugurar una nueva estatuas de grandes dimensiones en Melilla con un concepto similar a La mujer de Coslada (un torso que alcanza los cinco metros y medio de altura) y otra obra a tamaño natural para Murcia.

Los proyectos se realizan mano a mano con el artista almeriense Andrés García Ibáñez, quien en una conversación con La Tribuna detalló: «Llevamos colaborando desde hace tiempo, tenemos amistad desde hace ya bastantes años».

«Estamos preparando una escultura monumental para Melilla, un bronce de seis metros», precisa García Ibáñez, quien observa que tanto el diseño como la supervisión del proceso de elaboración la están realizando de manera conjunta. «Todo ese proceso de repasar el resultado de la fundición en bronce, que normalmente lo hace una persona, lo pueden hacer dos y eso lo hace más bonito, sobre todo para mí», subraya.

También está pendiente de presentación en el Museo de Murcia un conjunto de cinco torsos que el artista almeriense explica que están vinculados al de Melilla. «Hace un año recibimos el encargo, por lo que se elaboraron cinco torsos a modo de boceto, tres masculinos, uno de ellos de un niño, y dos femeninos y se lo presentamos a Juan José Imbroda», pero una vez hecha la elección, «como ya teníamos hecho el trabajo de modelado le propuse materializarlo como una obra independiente». De modo que se ha rematado en mármol griego de Thassos, «la mejor piedra blanca del mundo», apunta.

Recuerda que el proyecto de Melilla nació de la mano del escultor Julio López, fallecido el pasado mes de mayo. En cualquier caso observa que la relación con Antonio López es inmejorable, «nos hemos encontrado siempre muy bien charlando y trabajando juntos, de modo que es muy fácil que se propicie la creatividad porque estamos en posturas muy similares».