La cita era a las nueve de la noche, aunque los participantes tenían que estar a las ocho y media de la tarde en el Parque del Este. A esa hora, los accesos al parque eran ya todo un hervidero de gente. Todos acudían con el mismo objetivo, batir el récord Guinness del brindis con vino por parejas más grande del mundo. Y ayer se consiguió arrebatar el título a Tokio, que en 2001 reunió a un total de 401 parejas. En el momento del brindis, y cogidos por el brazo, una misma frase «Valdepeñas brinda alegrías».
La iniciativa, promovida por el Ayuntamiento de Valdepeñas y por la Asociación Interprofesional de la Denominación de Origen Valdepeñas, buscaba promocionar sus vinos y el turismo de la ciudad con motivo de la celebración de las LXI Fiestas del Vino de la localidad. Se alcanzó con creces. Y es que, aunque no era necesaria la inscripción previa, con el fin de tener un recuento medianamente claro de la gente que iba a participar, la organización aconsejó que los que fueran a participar se inscribieran días antes en la oficina de turismo de la localidad. Había entonces 1.000 parejas inscritas. Pero la alta participación, más de 4.000 personas, llegó a desbordar el evento que debido a la gran afluencia de gente tuvo que retrasarse hasta algo más tarde de las diez de la noche, momento en que Valdepeñas conseguía su récord Guinness, brindando por parejas con vino. El notario certificó 1.000 parejas, el máximo que permite Guinness certificar mediante el sistema de recuento por boleto de entrada.
El alcalde, Jesús Martín, sintió desde la organización que se fracasara en las previsiones, «pensábamos en unas 1.000 o 2.000 personas, pero no las más de 4.000 que han acudido. En todo caso, dichoso fracaso aquel que nos eleva por encima de nuestras posibilidades», señaló Martín..
Uno de los momentos del brindis. - Foto: Pablo Lorente. Por su parte, el presidente de la DO Valdepeñas, Carlos Nieto, aseguró que «los mejores embajadores de nuestros vinos somos nosotros mismos, los valdepeñeros, y con actos como este contribuimos a que se hable de Valdepeñas, de la ciudad y, de sus vinos».