«Ahora tengo margen para buscar alguna escapada»

Eduardo Gómez
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Entrevista a Sergio Pardilla, ciclista del MTN-Qhubeka y que ocupa el puesto 20 en la clasificación general

Sergio Padilla, con gesto de concentración durante una etapa. - Foto: MTN QHUBEKA

Sergio Pardilla (MTN-Qhubeka) ha ido de más a menos en esta primera parte de la Vuelta a España. El escalador de Membrilla comenzó muy bien la carrera, llegando incluso a lucir un día el maillot de la combinada. Sin embargo, todo empezó a torcerse el viernes con una caída camino de Alcaudete (Jaén). Al día siguiente, le pillaron los abanicos en la etapa de Albacete y el domingo cedió tiempo en la ascensión a Valdelinares. Ahora ocupa la vigésima plaza a 4.33 del líder, Nairo Quintana. Una diferencia que le puede dejar margen para buscar las fugas en las etapas de montaña.

¿Qué tal le ha venido el día de descanso?

Yo creo que siempre viene bien para reconfigurar la carrera. Las etapas se van sucediendo y ya se va acusando la fatiga. No me viene mal un descanso.

¿Qué valoración hace de estos primeros días de carrera?

Se me ha complicado todo en los últimos días. Primero fue la caída, luego me pilló el abanico y el domingo no tuve un buen día. Toca replantearse la carrera.

¿Qué consecuencias tuvo esa caída del viernes?

Me di un buen golpe en el costado derecho y me molesta la zona de las costillas.

¿Influyó en su rendimiento del fin de semana?

La etapa de los abanicos de Albacete era un día complicado para mí porque soy un corredor de poco peso. Después, el domingo se rodó muy rápido, las temperaturas bajaron mucho y no tuve un buen día.

Ahora que ha cedido tiempo, ¿se olvida de la general y luchará más por una victoria de etapa?

El martes tenemos la contrarreloj y voy a hacer lo que pueda. Intentaré hacerlo lo mejor posible y sé que cederé algo de tiempo. Con ese tiempo perdido más el que ya tengo puedo tener margen para buscar alguna escapada en las etapas de montaña. Es la única forma de vencer alguna etapa porque hay seis o siete corredores que están inalcanzables y si te la juegas con ellos en los últimos kilómetros tienes las de perder.
 

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